Miles de abejas mueren en Zona de Reserva debido a la escasez hídrica que afecta al país

Tras 48 horas de operativo, el sábado 4 y domingo 5 de julio, el equipo de la ONG Plan Bee rescató 21 colmenas con vida, de un total de 150 que se encontraban en la Zona de Reserva ubicada en Santa María de Los Molles, V región.

Afectadas por la extrema sequía y falta de floración, las colmenas fueron trasladadas hacia la zona de La Cruz, V región, donde reciben los cuidados para que se fortalezcan, mientras se recupera la actual zona de reserva y se crea una nueva.

Luis Antonio Fernández, apicultor de la Zona de Reserva, dijo que “debido a una de las sequías más grandes sufridas en los últimos 150 años, nos vimos en la obligación de retirar las abejas vivas, hasta que mejore la situación existente”.

El rescate comenzó el sábado 4 con el diagnóstico de la situación y la revisión de las colmenas sobrevivientes. El Equipo acampó esa noche en el refugio de la Zona de Reserva para continuar con el rescate en la madrugada del día siguiente.

Paula Pedreros, directora e ingeniero agrónomo de ONG Plan Bee, señaló que “las colmenas se trasladaron hacia la comuna de La Cruz para ser estabilizadas y fortalecidas en una parcela donde se producen hierbas medicinales y paltas. En el lugar, no se aplica ningún producto químico y hay abundancia en floración, aunque la zona está expuesta a radiación electromagnética y transgénicos en sus alrededores”.

El equipo de ONG Plan Bee asegura que la Zona de Reserva puede recuperarse con el uso de tecnología para captar agua y reforestando; por eso, inician la campaña Acción por la Vida para recaudar los fondos que permita instalar al menos 50 atrapa nieblas, que permitan cubrir 3500 hectáreas, para luego insertar floración nativa.

Sin embargo, también enfatizan que es necesario crear un nuevo lugar de protección que cumpla con las condiciones adecuadas para sostener la vida.

La Directora de Plan Bee enfatizó la importancia de tener al menos una zona de reserva ya que es una solución real a un problema existente a nivel mundial. “Sin abejas, no sólo el 80% de nuestros alimentos desaparece, sino que la vida de millones de especies que existen gracias a la polinización”.

Santa María de Los Molles continúa siendo una zona libre de radiación, pesticidas y transgénicos. “Si logramos sostener con un poco de agua y floración, podemos recuperar la zona, pero se necesita al menos 50 atrapanieblas, floración nativa para reforestar y recursos para la implementación y desarrollo de esta acción”, agregó el ingeniero asesor, Antonio Bogdan.