Las medidas con que el Congreso busca recuperar la confianza de la ciudadanía en plena crisis institucional

En 2006, un proyecto que buscaba regular el financiamiento de campañas y eliminar el aporte de empresas en política ingresó a la Cámara de Diputados. Sin embargo, según admiten los propios legisladores, la iniciativa contó con poco respaldo y terminó diluyéndose en el Congreso. Nueve años después, la situación es completamente distinta: las crisis Penta, SQM y Caval, y el desplome de la confianza en las instituciones, han dejado poco margen de acción a los parlamentarios para regodearse. Y hoy están dispuestos a tomar “medidas dolorosas” para recuperar la confianza de la ciudadanía. “Si las medidas no son radicales y no duelen, no sirven”, dice el presidente del Senado, Patricio Walker.

A la espera de que la Presidenta envíe proyectos de ley basados en las propuestas que hoy recibió de la Comisión Engel, estas son algunas de las medidas que se están analizando en el Congreso para regular la relación entre la política y los negocios.  Los presidentes de la Cámara del Senado y de la Cámara de Diputados, se comprometieron a aprobar todos los proyectos durante este año.

1.- Que se vayan todos… los que infringen la ley electoral

El proyecto que se analiza en el Senado castiga con la pérdida de su escaño a los parlamentarios que cometan irregularidades en el financiamiento de sus campañas. Por su parte, el Ejecutivo presentó otra iniciativa que aplica la misma sanción a alcaldes, cores y concejales.

2.- Fin a la reeleción: Nadie se repite el plato

Ni los parlamentarios, ni los alcaldes, ni los concejales ni los cores podrían ir a la reelección de manera sucesiva hasta el fin de sus días, como sucede hoy en día.

3.- Más razones para decir adiós

Hoy los legisladores solo pueden renunciar por motivos de salud. Pero el proyecto de ley que analiza la Cámara agrega los cuestionamientos políticos severos y los problemas familiares como razones para que un parlamentario pueda renunciar.

4.- Fin al fuero: Parlamentarios con pijama a rayas

El fuero es un privilegio que indica que los parlamentarios no pueden recibir ninguna medida penal que afecte su libertad a menos que sean desaforados. El proyecto busca eliminar este privilegio y que un parlamentario pueda quedar por ejemplo, en prisión preventiva.

5.- Rebaja en la dieta parlamentaria: A ajustarse el cinturón

La Cámara de Diputados ya aprobó un acuerdo para reducir los sueldos de las altas autoridades y aumentar la remuneración de los funcionarios públicos de más bajos ingresos. El sueldo de los parlamentarios llegaría a cerca de 6 millones 900 mil pesos en 2020, y sería solo 10 veces mayor al de los funcionarios de ingresos más bajos. Hoy es 27 veces más alto.

6.- Todos declararán intereses

Para evitar casos como el de Sebastián Dávalos, quien no estaba obligado a hacer una declaración de intereses y de patrimonio como Director Sociocultural de La Moneda, en el Senado se propuso ampliar la cantidad de cargos estatales que por ley deben transparentar sus posesiones. No solo incluirán al Director Sociocultural, sino que también a las conyugues o convivientes de los funcionarios públicos y a quienes trabajan con boletas de honorario.

7.- Fideicomiso ciego: Chao a los negocios

La iniciativa del Senado busca que las autoridades que posean acciones sobre un monto determinado, deban venderlas o entregarlas a alguien para que las administre sin que los dueños tengan acceso a esa información. Pero también que las autoridades deban vender obligatoriamente sus derechos en sociedades que hagan negocios con el Estado.

8.- Cárcel para delitos con cuello y corbata

Los delitos como soborno y cohecho, que tienen penas máximas de hasta tres años de cárcel, tendrán mínimo de cinco años de cárcel y un máximo de diez. También se quiere ampliar las penas para el tráfico de influencias. En el caso de las empresas, se penalizará con cárcel los delitos de colusión y todos los que atenten con la libre competencia.

9.- A machetear a otro lado: fin a los aportes de empresas

Para evitar casos como el de Penta, el proyecto que envió el Ejecutivo propone eliminar definitivamente el aporte de empresas a campañas políticas y a los partidos. También se analiza eliminar los aportes reservados y anónimos.