Vecino de San Bernardo se querella contra Carabineros por matar a su mascota en operativo erróneo
La querella fue presentada por Luis Flores Leiva, vecino de la comuna de San Bernardo a cuya casa ingresaron los funcionarios de Carabineros para detenerlo, el pasado 6 de diciembre de 2017; sin embargo, estaban buscando a otra persona.
Por Redacción EL DÍNAMO
Por los delitos de lesiones leves, daños simples, hurto, amenazas, apremios ilegítimos y maltrato animal se presentó una querella en contra de un grupo de la Sección de Investigaciones Policiales (SIP) de la 14° Comisaría de Carabineros de San Bernardo.
La querella fue presentada por Luis Flores Leiva, vecino de la comuna de San Bernardo a cuya casa ingresaron los funcionarios de Carabineros para detenerlo, el pasado 6 de diciembre de 2017; sin embargo, estaban buscando a otra persona.
Según se detalla en la presentación, los funcionarios de Carabineros ingresaron a la casa rompiendo la reja de entrada, luego subieron al segundo piso, en donde se encontraba Flores con su familia, tomándolo por el cuello lo lanzan al piso y lo apuntan con armas de fuego, y comienzan a golpearlo en las costillas, frente a su esposa y sus dos hijos.
Durante este procedimiento, la mascota de la familia, un poodle de nombre Joaquín, no dejaba de ladrar a Carabineros, por lo que uno de ellos, relata la demanda, lo trasladó al patio de la casa, golpeándolo hasta matarlo.
Tras los reclamos de la familia, dichos funcionarios tomaron el cuerpo del perro y lo subieron al carro policial.
En la denuncia se detalla que los funcionarios policiales habrían amenazado al dueño de casa, por lo que éste fue obligado a firmar un documento que constataba que sólo había algunos daños materiales a su hogar. El documento fue firmado por el teniente Michael Daza Romero, el sargento segundo Rodrigo Morales Muñoz y el cabo segundo Sebastián Cádiz Escobar, todos funcionarios de la 14° Comisaría de Carabineros de San Bernardo.
Para el abogado Cristián Apiolaza Acevedo, de la Defensoría de Derechos Animales –quien se encuentra representando a Flores Leiva en este claro caso de maltrato animal con resultado de muerte- “este es un caso gravísimo debido a que, por una parte, se trata de la comisión de distintos delitos por funcionarios de Carabineros en un contexto de la violencia policial; y también, por otra parte, porque involucra una arista administrativa toda vez que tanto el Ministerio Público como los Tribunales autorizaron el operativo en cuestión”.
El 18 de enero de este año, la querella fue admitida por el Juzgado de Garantía de San Bernardo.
