Gobierno apela a “matrimonio indisoluble” ante reclamos de la UDI y RN por malo resultados electorales

Como una mala resaca, las consecuencias de la pérdida de comunas emblemáticas en las elecciones municipales del domingo –entre ellas Santiago, Concepción, Providencia, Independencia y Ñuñoa- continuó siendo la mañana de ayer un gran dolor de cabeza para el Gobierno que recibió en La Moneda la artillería de la UDI y RN por los resultados electorales.

El comité político que encabezó el titular de Interior, Rodrigo Hinzpeter, estuvo cargado de tensión y recriminaciones al analizar en qué falló el bloque gobernante en estos comicios. Por parte de la UDI, el encargado de plantear los reclamos fue el presidente del partido, Patricio Melero, quien llegó solo hasta palacio.

Su primer planteamiento fue que los malos resultados de su tienda -que incluso tuvo en riesgo al alcalde de Estación Central, Rodrigo Delgado frente a Camilo Ballestero (PC) – fue producto de un voto de castigo al gobierno que desde las movilizaciones estudiantiles no ha logrado un apoyo superior al 30%. Ello, afirmó, arrastró al gremialismo a uno de sus peores resultados desde el 2000, cuando de la mano de Joaquín Lavín la UDI se convirtió en el partido más votado de Chile.

Su segunda afirmación fue, sin embargo, la que generó el mayor repudio por parte de Hinzpeter. A modo de advertencia, Melero apuntó que desde ahora en adelante la UDI se iba a preocupar de defender su capital político más allá de si esto era funcional o no al Presidente Sebastián Piñera.

Molesto, Hinzpeter replicó que el Gobierno terminaba en marzo de 2014 y que hasta ese minuto la derecha tenía que actuar unida tras Piñera y que no era posible aceptar amenazas de esa índole. Ante la tensión del momento, Chadwick intervino para calmar las aguas y sostuvo que la Alianza y el Gobierno están en un “matrimonio indisoluble” y que había que actuar en consecuencia, ya que sólo unidos podrían revertir el complejo escenario.

Desde RN, en tanto, también hubo cuestionamientos por parte del presidente del partido, Carlos Larraín al Ejecutivo. El senador, quien estuvo acompañado en la reunión del secretario general, Mario Desbordes y el senador Alberto Espina, entre otros, afirmó que el Gobierno pecó de ineptitud al no saber leer las elecciones y rodearse de “técnicos asépticos” con mucha academia y nula capacidad de entender qué pasa en las calles.

De hecho, para RN ni el resultado en Puente Alto implica un triunfo real ya que sólo acudió a sufragar el 28% del padrón contemplado, mucho menos que en las elecciones de 2008.

Debate presidencial

El otro tema que marcó el comité fue el debate presidencial. Hinzpeter les pidió a los partidos entregar su opinión sobre cuándo deberían abandonar los ministros presidenciables sus cargos. RN postuló que a fines de este año, mientras que Melero accedió a que el cambio se produjera en enero, para marcar distancia del golpe a la imagen de Laurence Golborne que significó la fallida celebración en el balcón del municipio de Santiago.

Sobre este punto, Chadwick admitió públicamente que fue un “error” de La Moneda alimentar esta polémica y asesores de Gobierno coinciden en que se pecó de soberbia. “Hubo una serie de errores no forzados hasta en el mismo día de la elección cuando se instaló una carpa que después debió ser desarmada. Son detalles, pero también señales de reacciones equívocas”, aseguran.