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25 de Septiembre de 2013

Director de 'El último tango en París' confiesa la verdad sobre polémica 'escena de la mantequilla'

"La idea se nos ocurrió con Brando mientras estábamos desayunando. En un momento, él comenzó a untar una baguette con manteca, y de pronto nos miramos cómplices", relata el cineasta , confirmando la versión que la actriz María Shneider habría dado al Daily Mail en 2007.

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A más de 40 años de su estreno, Bernardo Bertolucci, director de ‘El último tango en París’ (prohibida en Chile durante la dictadura) desclasificó el cómo se hizo en realidad la polémica escena en que Marlon Brando sodomiza a la ya fallecida María Schneider, por entonces de sólo 20 años de edad, desatando una de las más atrevidas escenas del cine arte de esa época.

De acuerdo con la información publicada por La Voz, Bertolucci admitió que tanto él como Brando se aprovecharon de la juventud e inocencia de Schneider, sin darle información sobre lo que ocurriría en la escena, obteniendo con ello una reacción “no de actriz, sino de mujer joven”, que fue la que quedó en el corte final (sin censura) del filme por el que se ganó una nominación al Oscar como mejor director.

“La idea se nos ocurrió con Brando  mientras estábamos desayunando. En un momento, él comenzó a untar una baguette con manteca, y de pronto nos miramos cómplices”, señaló el director agregando que “Decidimos no decirle nada a Maria para obtener una reacción más realista, no de actriz sino de mujer joven. En el momento en que llora, grita y se siente herida, en verdad ya estaba dolida por el hecho de que se le había ocultado cómo sería la escena en que su personaje era sodomizado, y lo cierto es que haberse sentido de esa manera fue útil a la película”, confesó el galardonado cineasta.

La actriz ya había deslizado esta versión  al Daily Mail en 2007  “Debería haber llamado a mi agente o a mi abogado, porque nadie puede ser obligado como actor a hacer algo que no esté en el guión. Pero en ese entonces yo era muy joven y no lo sabía. Fui obligada a exponerme a lo que creo fue verdadera violencia. Las lágrimas que derramo en esa película son verdaderas: son lágrimas de humillación”.

 

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