Lo indignante es invisible a los ojos

Finalizando el primer mes del nuevo año, podemos mirar con más de perspectiva el 2016 y tratar de sacar las conclusiones de cuáles fueron los hitos más importantes que marcaron a nuestro continente. Hitos que van marcando las tendencias de hacia dónde avanza la cultura Americana: una ciudadanía que se levanta en contra de la corrupción, mayor inclusión a la diversidad sexual, resurrección del fantasma del racismo, crisis migratorias y tensiones entre países, término de gobiernos emblemáticos… ¿Qué hitos rescatamos en cada mes del año que se fue?

Enero, finaliza el gobierno de Pepe Mujica en Uruguay y fallece Pedro Lemebel en Chile; febrero, se publica un estudio multinacional sobre “El Hambre”, del argentino Martín Caparrós y en Chile explota el caso CAVAL; marzo, en el aniversario 50 de la marcha de Selma, liderada por Martin Luther King Jr, muere joven afroamericano Anthony Robinson en EEUU, reabriéndose las tensiones raciales; abril, muere Eduardo Galeano, se aprueba federalmente el matrimonio gay en todos los estados de EEUU y se reabren relaciones diplomáticas entre Cuba y EEUU; mayo, son detenidos líderes de la FIFA de diversos continentes, incluyendo América, y Luis Almagro asume la secretaría general de la OEA; junio, República Dominicana inicia las deportaciones de haitianos y Fútbol Más impulsa el uso de la Tarjeta Verde en la Copa América para aumentar la tolerancia entre países; julio, en México se fuga el Chapo Guzmán de la cárcel y Chile gana la Copa América; agosto, bajo la presión ciudadana, renuncia el presidente de Guatemala acusado de corrupción, y conmueve la noticia de la muerte del niño Aylan Kurdi, quien apareció ahogado en la playa de Turquía en medio de la crisis migratoria; septiembre, la Asamblea General de la ONU aprueba los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) que orientan un acuerdo mundial de desarrollo para el 2030; noviembre, conmoción mundial por la masacre en París; y diciembre, es juzgado por corrupción ex presidente de El Salvador, oposición gana mayoría en parlamento venezolano, y Cristina Fernández culmina ocho años de gobierno.

Pero hay un hito que no aparece aquí, que no fue noticia, que no conmocionó. Un hito que se ha transformado en un lugar común y, como tal, como lo que sucede con un árbol en una plaza pública por la que transitamos todos los días, ha comenzado a ser invisible. Es el hito de que América sigue siendo el continente más desigual del planeta, y existen elevados niveles de pobreza (en LA y el Caribe hay más de 167 millones de personas que viven en situación de pobreza, y de éstas, 40,5% son niños). Podrás decir “Sí, sí, ya lo sabemos. Lo dicen y lo recuerdan todos los años”. Pero no da lo mismo: este hito es una vergüenza, muestra lo peor de nosotros, da asco. Y lo que más da rabia de que sea invisible, es justamente que hay personas que se acostumbran a ello, y no asumen la responsabilidad de cambiar su forma de ser, de relacionarse, de consumir, de compartir, y de actuar para terminar con el sufrimiento que genera esta realidad en personas, en niños y niñas. Nosotros no nos acostumbramos. Hoy, América es la principal responsable de sus pobrezas y, como nunca, está en sus manos superarla.