Condenas por soborno y conflicto de interés: el historial de los representantes de Ruiz-Tagle y Vial en ByN
Mientras Angel Maulén está cumpliendo una condena por sobornos reiterados en la Comisión Nacional de Acreditación, Stöhwing enfrenta una querella en tribunales por omisión dolosa y negociación incompatible.
Por Redacción EL DÍNAMO
Este lunes se llevó a cabo la junta de accionistas de Blanco y Negro, donde quedó constituido el directorio de la concesionaria que rige los destinos de Colo Colo.
Así, además del propio empresario, por el bloque de Aníbal Mosa fueron designados Pablo Morales y Harold Mayne-Nicholls, uno de los candidatos para tomar la testera de ByN.
A ellos se suman Alfredo Stöhwing, Diego González, Ángel Maulén y Carlos Cortés, como representantes de Gabriel Ruiz-Tagle y Leonidas Vial, más Edmundo Valladares y José Daniel Morón como “rostros” del Club Social y Deportivo Colo Colo.
Sin embargo, un hecho que generó incomodidad en las huestes albas fueron los nombres elegidos por el bloque de Ruiz-Tagle y Vial para que los representen en la mesa del directorio.
Y es que la designación de Maulén no pasó inadvertida, dado que en junio de 2016 fue condenado a tres años de presidio y a una multa de 100 millones de pesos por los delitos reiterados de sobornos, en el marco de la investigación del Ministerio Público por irregularidades en la Comisión Nacional de Acreditación (CNA).
El dirigente DC y ex rector de la Universidad Pedro de Valdivia alcanzó un acuerdo de la Fiscalía, por lo que junto con recibir una baja pena, puede cumplir su condena en libertad.
Pero este no es el único director del oficialismo de Blanco y Negro que tiene problemas judiciales, ya que Alfredo Stöhwing enfrenta una querella en el 4º Juzgado de Garantía de Santiago por omisión dolosa y de negociación incompatible.
Según consignó La Tercera, Stöhwing era uno de los controladores de la sociedad ASF, dueña del 50% de la Compañía de Seguros General Continental (Inversiones Credere S.A.), encargada de los seguros de viaje en Colo Colo, hecho cuestionado por Aníbal Mosa por un evidente conflicto de interés.
Tras realizar una junta de accionistas para ejecutar un aumento de capital, el ahora director de ByN no pudo presentarse en la fecha definida para comprar las acciones y lo hizo después, cuando el plazo ya estaba vencido, comprando el paquete accionario a título personal y a un precio mucho menor, señala la acción judicial.
Esta indagatoria está en manos del fiscal Marcelo Marcelo Acuña, de la Unidad de Delitos de Alta Complejidad de la Fiscalía Oriente, y de la Brigada de Delitos Económicos de la PDI.
