Segunda vuelta: la gran preocupación del piñerismo
Si bien los datos del CEP para la primera vuelta dan una amplia ventaja a Piñera, el balotaje muestra una diferencia más borrosa frente a Guillier, poniendo en duda un triunfo confiado.
Por Daniel Martínez G.
Cuatro puntos aumentó el pre candidato presidencial de Chile Vamos, Sebastián Piñera, en los últimos resultados de la encuesta del Centro de Estudios Públicos CEP, correspondiente a la medición de abril y mayo, en comparación con el sondeo pasado donde obtuvo un 20%.
Las nuevas cifras colocan al ex presidente en la delantera de la carrera presidencial en la intención de voto para la primera vuelta de noviembre próximo, a un mes -además- de las primarias del bloque que se realizarán el domingo 2 de julio, compitiendo frente a Manuel José Ossandón -que obtuvo un 5%- y Felipe Kast -quien no apareció en las primeras preferencias-.
Recién conocidos los resultados, desde el piñerismo salieron a aplaudir el desplante de su candidato. Mario Desbordes, secretario general de Renovación Nacional, afirmó que “es el único candidato en la centro derecha que derrota a la Nueva Mayoría”, demostrando la confianza que guarda el sector frente a un eventual retorno a La Moneda.
Pero ¿es una derrota segura para la Nueva Mayoría? ¿Será la segunda vez que la Presidenta Michelle Bachelet entregue la banda presidencial a la cara de Chile Vamos? Si bien en las cifras de primera vuelta el ex mandatario lidera por una amplia ventaja, los números frente a la segunda vuelta son menos decidores y hacen tambalear el triunfo seguro.
En un enfrentamiento entre Piñera y Guillier, según la CEP, habría menos de cinco puntos de diferencia: la carta de derecha obtendría un 33% de los votos mientras que la carta del sector progresista de la Nueva Mayoría un 28,7%. La diferencia de cuatro puntos se hace aún más borrosa si se considera que un 22,3% afirma que no votará, que marcará blanco o nulo.
En esa línea, los resultados del CEP apuntarían a que la única esperanza de la Nueva Mayoría para mantenerse en el poder es apuntar al voto indeciso o aún descontento con la política, y de esa forma superar a Piñera. Por otro lado, en una enfrentamiento entre Piñera y la candidata de la Democracia Cristiana, Carolina Goic, el primero obtiene un 36% y la segunda un 14%, diluyendo toda posibilidad de continuar en el Gobierno.
