Organizaciones rechazan votación del proyecto de Ley de Migraciones: “Criminaliza en vez de integrar”
Desde el Movimiento Acción Migrante declararon como "falto de derechos, humanidad" al proyecto luego de que se rechazaron puntos claves como el cambio de categoría de visa en el país y la visa para víctimas de trata y víctimas de violencia intrafamiliar, entre otros.
Por Redacción EL DÍNAMO
Este jueves la Cámara de Diputados votó el proyecto de Ley de Migraciones, iniciativa despachada al Senado y que fue rechazada por el Movimiento Acción Migrante (MAM) dada una serie de retrocesos en materia de derechos y procedimientos que calificaron como fundamentales, consagrando, según señalaron, una “perspectiva de seguridad y orden”.
“No se aprobó el cambio de categoría de visa en el país, lo que traerá más irregularidad y más inseguridad para nuestras comunidades; no se aprobó la visa para víctimas de trata, niños, niñas y adolescentes y mujeres víctimas de violencia intrafamiliar; se rechazó el principio de no devolución consagrado en instrumentos internacionales y se perdió el estatuto especial para pueblos indígenas, que facilitaba el paso hacia un lado y otro de la frontera”, detallaron.
La organización calificó las decisiones de “indignas”, esto ya que “primó la visión más estricta de la migración, se continuó con la (i)lógica por la cual no se firmó el Pacto Mundial de Migraciones: seguridad y aislacionismo, negando y resignificando los derechos humanos y descartando el multilateralismo”.
Además, aprovecharon de interpelar duramente al rol de la oposición en la Cámara: “Nos encontramos lamentablemente sorprendidos (o quizás no tanto) al ver cómo el gobierno estando en minoría en la sala de diputados, logra sacar un proyecto de ley nefasto, sin que prime la fuerza de oposición. Con la ignorancia y complicidad pasó hacia el Senado un proyecto de migraciones con errores y vacíos enormes”.
Este retroceso legislativo, concluyeron desde el MAM, se inscribe en una política migratoria a través de decretos “como en los peores tiempos de nuestras dictaduras”, la imposición de un sistema de “visado racista” y la creación de un “nuevo enemigo interno que al mismo tiempo sirve chivo expiatorio en tiempos de crisis”.
