Hospital indemnizará a paciente mal diagnosticada: estuvo 20 años en tratamiento
La mujer fue sometida por varios años a un tratamiento que nunca iba a dar resultados positivos, debido a que nunca tuvo la enfermedad.
Por Brenda Martínez
El hospital San Juan de Dios deberá pagar una indemnización de 10 millones de pesos a una paciente que fue mal diagnosticada de epilepsia y tratada 20 años por una enfermedad que no padecía.
De acuerdo al fallo del El Cuarto Juzgado Civil de Santiago, se estableció una falta de servicio del centro asistencial, ubicado en la comuna de Santiago, por el diagnóstico errado y por haber perdido la ficha clínica de la afectada.
De acuerdo a los antecedentes, durante varios años la mujer fue sometida a un tratamiento que nunca iba a dar resultados positivos, debido a que nunca tuvo la enfermedad.
Y aunque parezca una mala broma, fueron doctores del mismo hospital quienes notaron el grave error en el diagnóstico al revisar la historia clínica y los exámenes realizados a la afectada, los que estuvieron a la vista de los profesionales que la trataron.
Esto, según lo expuesto por el juez Luis Quezada Fonseca, demuestra una falta de conocimientos de las características de la enfermedad diagnosticada, por parte de los doctores que la atendieron, ” ya que si bien no eran epileptólogos, si tenían la especialidad de neurólogos, es decir, se trata de profesionales dotados con los conocimientos necesarios y específicos para tratar los trastornos del sistema nervioso”.
En la instancia, también se señaló que “un porcentaje mínimo del electroencefalograma (examen más importante para diagnosticar la epilepsia) no muestra ningún tipo de alteración en pacientes genuinamente epilépticos -solo un 10%, según el testimonio de uno de los médicos que detectó el error.
Por lo que los especialistas en “conocimientos para el diagnóstico, tratamiento y rehabilitación de todas las enfermedades que involucran al sistema nervioso central, sistema nervioso periférico y el sistema nervioso autónomo, debieron plantearse la posibilidad de otras hipótesis diagnósticas (…) no conformándose solo con el diagnóstico de epilepsia”, agregó el profesional.
Finalmente, y respecto a la pérdida de la ficha clínica de la afectada, el fallo señala que el extravío de estos documentos “en un centro hospitalario constituye también una falta de diligencia y cuidado de carácter grave”,ya que “en ellas se contiene la historia clínica, los estudios y demás documentos donde se registran exámenes, procedimientos y tratamientos a los que fueron sometidos”.
