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27 de Septiembre de 2019

Van Rysselberghe defiende con todo a Salaberry: “La fiscalía parece el brazo armado de la izquierda”

Van Rysselberghe ha respaldado a Salaberry desde que se conoció la denuncia de que el funcionario gubernamental fue infraccionado el pasado 25 de agosto por no respetar tres semáforos en rojo e insultar a un inspector municipal en Ñuñoa.

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Van Rysselberghe Salaberry
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La presidenta de la Unión Demócrata Independiente (UDI), Jacqueline Van Rysselberghe, salió a defender al cuestionado subsecretario de Desarrollo Regional, Felipe Salaberry, militante de dicho partido.

Van Rysselberghe ha respaldado a Salaberry desde que se conoció la denuncia de que el funcionario gubernamental fue infraccionado el pasado 25 de agosto por pasarse tres semáforos en rojo e insultar a un inspector municipal en la comuna de Ñuñoa.

Tras conocer esta grave denuncia, la vocera de Gobierno, Cecilia Pérez, afirmó que “hay dos versiones” sobre lo ocurrido con el subsecretario Salaberry, por lo que descartó su salida del cargo y aseguró que le solicitaron “que él se ponga inmediatamente a disposición de la justicia”.

Ese mismo día, Felipe Salaberry llegó hasta el Juzgado de Policía Local de Ñuñoa para conocer los detalles de la denuncia. En ese lugar, el subsecretario aseguró que conoció los detalles de la denuncia “por la prensa” y que era “imposible que me haya saltado las luces rojas”.

Finalmente, el Ministerio Público abrió una investigación por presunto tráfico de influencias por parte de Iris Salaberry, funcionaria de la Municipalidad de Ñuñoa y hermana del subsecretario de Desarrollo Regional, quien habría intentado dejar sin efecto la infracción de tránsito cursada a la autoridad.

Respecto a esta última decisión de la fiscalía, la senadora Van Rysselberghe cuestionó “por qué la fiscalía tiene esta rapidez para actuar de oficio en un caso que tiene que ver con una infracción de tránsito, que lo resuelven los Juzgados de Policía Local”.

“Me impresiona el oportunismo, el sesgo de la fiscalía, en donde aparece como un brazo armado de la izquierda chilena”, agregó desde la región de Biobío, en alusión a la situación judicial de Salaberry.

“El supuesto tráfico de influencias sería por un hecho que ni siquiera sucedió, porque el supuesto parte empadronado no ha sido anulado”, mencionó Van Rysselberghe, agregando que le causaba extrañeza que el ente persecutor no actuara de oficio “con la misma rapidez con las denuncias que hubo hace un par de semanas con OAS respecto a financiamiento irregular de la ex Presidenta Bachelet”.

Anteriormente, Van Rysselberghe aseguró que “sería grave que lo sacaran sin pruebas” respecto a Salaberry, ya que sería considerado un hecho grave contra la UDI.

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