“Espero que se haga justicia”: hombre herido en Reñaca relata momento en que recibió disparo
El estadounidense de 56 años fue formalizado y quedó en prisión preventiva durante los 90 días que durará la investigación.
Por Brenda Martínez
Luis Ahumada, el hincha de Wanderers que resultó herido el pasado domingo en Reñaca por uno de los disparos realizados por el estadounidense John Cobin, entregó detalles de su estado de salud.
En conversación con El Mercurio de Valparaíso, Ahumada señaló que tiene “pena y rabia”, y que le ha costado mucho recibir atención médica que necesita.
Tras ser dado de alta del Hospital Gustavo Fricke, se le informó a Ahumada que debía acudir a curaciones de un consultorio cada 48 horas, para evitar infecciones.
Respecto a lo acontecido el pasado domingo, Ahumada señala que “ni siquiera interrumpí el tránsito, iba pasando y el primer disparo que dio este tipo es el que me da a mí, menos mal que la bala no rompió algo interno, porque por la pierna pasa una arteria, que si me la cortaba me moría ahí mismo. En el hospital me dijeron que tuve suerte y ahora sólo espero que se haga justicia”.
En ese sentido, reveló que el fiscal del caso le solicitó no hablar con la prensa respecto al juicio, para no entorpecer la investigación que se está llevando a cabo.
“La verdad es que no quería hablar, ni siquiera que se supiera dónde vivo, porque aún sigo con un poco de temor”.
Por otra parte, destacó que se ha sentido apoyado en su trabajo tras el hecho que lo dejaron tres meses con licencia médica. “No he tenido problemas en mi trabajo. La verdad es que mi complicación es con el sistema de salud, como es posible que no tengan personal ni insumos para atender; hay que decir que uno salió en la tele para que te pesquen, la injusticia es tremenda”.
“Me siento frustrado, imagínate, tengo que ir a rogar que me atiendan en los consultorios, tener que bajarme los pantalones para mostrar que soy el herido a bala de Reñaca. Esto es humillante, es muy denigrante. Imagínate que esta persona me disparó y la policía cuando lo fue a detener lo dejó hacer un streaming, a la hora que es alguien sin dinero se lo llevan a palos a la comisaría”, complemento.
En tanto, el estadounidense de 56 años fue formalizado y quedó en prisión preventiva durante los 90 días que durará la investigación.
