Presupuesto base cero y sin FMI: la propuesta de Renato Garín para no endeudar a Chile
El parlamentario propone cerrar el año y realizar una nueva ley de Presupuesto, la que según su estimación permitiría liberar entre 10 mil millones y 15 mil millones de dólares.
Por María Gabriela Salinas
Aumentar la deuda del Estado es una de las alternativas que baraja el Ministerio de Hacienda para poder llevar a cabo el Acuerdo Nacional por la pandemia de COVID-19 en Chile. Y si bien hay voces en el oficialismo y la oposición que no se negarían a la idea, en el Congreso el aumento de los pasivos ya tiene su principal detractor: el diputado Renato Garín (IND), quien asegura que es mejor rehacer el Presupuesto de la Nación en base cero para tener los recursos necesarios y hacer frente a la emergencia.
El eventual endeudamiento -según Garín- ronda en parte de la clase política como “única opción” para financiar ayudas sociales. Pese a que La Moneda no ha confirmado la medida (“no he logrado sacarle a Briones textual que se contraerá deuda, y yo hablo mucho con él“, dice el diputado de su relación con el ministro), afirma que el titular de Hacienda se encuentra presionado por economistas, sectores de RN, la oposición y el mismo Gobierno, para adquirir el compromiso financiero. Esto, para Garín, no es la solución.
“Hay que reasignar el Presupuesto”, expresa el diputado a EL DÍNAMO. “Es de toda lógica y evidente que primero contemos la plata. Propongo hacer una nueva Ley de Presupuesto, terminar el ejercicio fiscal de 2020 y abrir uno nuevo de emergencia para estructurarlo en base cero. Reestructurar para redestinar”, agrega, desestimando la actual estrategia de reasignaciones de gastos.
Según Renato Garín, de los 30 mil millones de dólares que aproximadamente quedan sin ejecutar, una Nueva Ley de Presupuesto permitiría liberar entre 10 mil millones y 15 mil millones de dólares (cifra que coincide con la estimación de gasto para enfrentar la crisis) y no adquirir nueva deuda fiscal. El monto se podría destinar a pymes, alimentación y nutrición, y a la crisis sanitaria e insumos médicos.
Un problema político
La idea de un presupuesto “en hoja en blanco” ya había sido evaluado por las autoridades. A mediados de mayo, el ministro de Hacienda, Ignacio Briones, anunció un cambio en la asignación fiscal, afirmando que desde 2021 habrá un “presupuesto de base cero ajustado”, es decir, sin considerar el gasto del año pasado como ocurre hoy. Sin embargo, esperar a que se discuta la Ley de Presupuesto 2021 no es alternativa para el diputado Garín.
“Base cero quiere decir que nos muestran toda la plata disponible y de ahí se asigna. Briones quiere hacerlo en noviembre, eso es una locura. No podemos llegar a noviembre con esta crisis“, afirma el parlamentario.
Según explica Renato Garín, la propuesta de no aumentar la deuda y reestructurar el Presupuesto hoy es un problema político ya que, aunque afirma contar con apoyo de parlamentarios de todos los sectores, no hay voluntad del Gobierno. “Cuando esto empezó yo me senté con Briones, me senté con Felipe Ward (en ese momento ministro de la Segpres), y les dije que este es el camino. Ellos consideran que es políticamente es un camino engorroso, menos que lo que hoy están haciendo… Les salió al revés, tanto que Ward perdió la pega“, afirma el diputado a EL DÍNAMO.
Sin embargo, quien fuera parte de Revolución Democrática reconoce que también “me preocupa que la centro-izquierda tenga la idea de endeudar al país. Es un error político de la centro-izquierda y el progresismo insólito, porque piensan que la deuda es neutral, sin consecuencia. Pero los países se endeudan políticamente con el Fondo Monetario Internacional”. En esa línea, Renato Garín afirma que cualquier tipo de deuda quita soberanía al país, que también se traduce en la implementación de políticas públicas
“Además, tirar 20 mil millones de dólares a la calle puede generar una inflación histórica sobre todo en alimentos. No será un problema de gasto, sino de precio. Y ahí la cosa es mucha más compleja”, agrega el parlamentario, quien concluye: “No entiendo esta lógica de la clase política, de economistas, de no pensar primero en lo que tenemos. Chile tiene un presupuesto enorme de 74 mil millones de dólares por año. Es mucha plata“.
