Esta mañana, en su segunda jornada en Chile, el polémico “Bus de la Libertad” buscaba llegar hasta las municipalidades de Santiago, Recoleta y Puente Alto para mostrar el rechazo de sus adherentes a las políticas estatales respecto de la diversidad sexual y la identidad de género.
Pero en cada lugar el Movimiento de Liberación Homosexual (Movilh) los esperó para funar el discurso de odio que han tratado de implantar por su paso por la región Metropolitana. Si bien esperaban ese tipo de respuestas de esa ONG, lo que nunca imaginaron fue la respuesta que les tenía preparada el alcalde de Recoleta, Daniel Jadue (PC).
En pleno frontis del municipio de su comuna, Jadue instaló una enorme bandera que identifica a la la transexualidad en todo el mundo, así como ocurre con la bandera LGBT. El edil, en todo caso, se reunió con ellos y escuchó sus demandas.