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9 de Enero de 2015

Las razones de por qué Ernesto Silva debería renunciar a la presidencia de la UDI

Correos, versiones desmentidas, parentescos y vínculos empresariales tienen al líder del gremialismo en la cuerda floja.

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“Yo creo que en esto, obviamente, pueden haber habido errores, (pero) tengo la convicción personal, después de haber analizando los antecedentes, de que no hay ilícito en esto, pero este es un tema que le corresponde a los tribunales definirlo”.

La última declaración pública del presidente de la UDI, Ernesto Silva, antes de la conferencia de prensa donde pidió disculpas públicas, iba en la línea comunicacional que el gremialismo ha utilizado desde que se destapó el caso Penta: poner todo en el ámbito del “error” y dejar que el tiempo pase mientras la justicia trabaja.

Sin embargo, la confesión de Iván Moreira, la aparición de un correo electrónico que Carlos Lavín envió al timonel UDI para preguntar por la Ley de Isapres y la boletas ideológicamente falsas que emitió Wagner a una sociedad cuya propiedad comparte con el presidente de la UDI, cambiaron el escenario. ¿Debe renunciar? Acá cuatro razones:

1.- Porque todo se derrumbó, hasta su teoría del empate

Hace exactamente cinco días, el líder del gremialismo pidió terminar con una “persecución política hipócrita” en contra del gremialismo y aseguró estar convencido que en el caso Penta no se cometió ilícito alguno. Pues bien, los antecedentes en las horas posteriores lo dejan al desnudo.

Las volteretas en las declaraciones  han sido vergonzosas. Primero con la senadora Ena Von Baer, quien aseguró en una entrevista a CNN el 27 de octubre que no había solicitado financiamiento a los dueños de Penta y luego las filtraciones de la investigación mostraron lo contrario: se publicó el correo donde quedaba en evidencia que la parlamentaria mintió. Más aún, este miércoles Iván Moreira reconoció haber usado un “mecanismo irregular” y de paso criticó la estrategia del “empate” que Silva intentaba poner en la agenda. “No soy de aquellos que para evadir su responsabilidad optan por culpar a otros o se escudan en el argumento de que se trata de prácticas generalizadas. Cuando uno se equivoca, no cabe la teoría del empate. Por ello hoy estoy dando la cara”, dijo.

2.- Porque está directamente implicado

Hoy el Servicio de Impuestos Internos (SII) presentó una querella en contra del ex subsecretario de Minería, Pablo Wagner, y su cuñada, María Carolina de la Cerda. Dentro de dicha acción legal, que trata de al menos 59 boletas de honorarios “ideológicamente falsas” -es decir, entregadas por servicios que no existieron- emitidas entre los años 2009 y 2014 por un monto total de $120 millones, se incluye además la acusación de haber extendido boletas falsas a la sociedad “Díaz, Moulian, Silva y Wagner Gestores Limitada”, donde Silva es uno de los propietarios.

 3.- No debería ser normal recibir esos mails

Otro mail filtrado. Esta vez entre el propio Ernesto Silva y Carlos Lavín.

“A todos los parlamentarios en distintos proyectos de ley le llegan muchas preguntas en temas públicos… Como parlamentarios tenemos el deber de recoger las distintas informaciones. Lo que sucede es que uno se forma una convicción personal, y sobre esa convicción y esos valores y sobre sus ideas uno toma decisiones y vota, y eso es lo que he hecho en todos los proyectos de ley siempre y en este caso también”.

Esa fue la particular explicación de Silva al publicarse el mail que le envió Carlos Lavín para hacer gestiones por la Ley de Isapres.“Si entendí bien esto, sería de la máxima gravedad. Para saber eso te estaba llamando y de acuerdo a eso ver si se nos ocurre algo, Saludos CEL”, le escribió Carlos Lavín. “Hola Carlos Eugenio. Es sólo para el plan garantizado. Saludos cordiales, Ernesto”, fue la respuesta del líder de la UDI en algo que a todas luces no es “normal”, como quiso decir.

4.- Porque es parte del “Choclo” que se desgrana

Carlos Alberto “Choclo” Délano, uno de los dueños del holding Penta y actualmente imputado por delitos tributarios y soborno, es su tío. Hasta ahí ningún problema, mal que mal, uno no elige a los parientes. Pero con todos los antecedentes que rodean el Caso Penta, la situación no ayuda a que la imagen de la UDI ante la ciudadanía, salga menos dañada de lo que ya está. Más bien provoca todo lo contrario. Como declaró el Diputado UDI por Aysén, David Sandoval, “El que el presidente (del partido) esté relacionado familiarmente y en los negocios con el grupo Penta dificulta todo. A nadie se le cuestiona que tenga relaciones familiares o participación en empresas, pero el tema está en cómo logramos separar los negocios de la actividad política. Eso no lo hemos logrado”.

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