Caso por riña callejera de ex asesor del INE suma denuncia por presión a testigos

La riña callejera que protagonizó a principios de octubre Maximiliano Raide, ex asesor del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) durante el primer Gobierno de Sebastián Piñera, sumó una nueva arista, está vez por eventuales presiones a los testigos del caso.

Los hechos se originaron el 1 de octubre en el restaurant El Europeo, de propiedad de Raide, donde el ex asesor del INE se trenzó a golpes con Alfonso Bulnes, por lo que denunció lo sucedido, lo que generó que Bulnes fuera formalizado por agresión.

Tras esto, el pasado 3 de noviembre la Fiscalía Oriente abrió una investigación contra Raide por conducción en estado de ebriedad, mientras en forma paralela comenzó a indagar las supuestas presiones que habrían recibido los testigos clave de la pelea.

Esta arista muestra que la denuncia por estas eventuales amenazas se presentó el 15 de octubre, por hechos supuestamente acaecidos el día 5 de ese mes, varios días antes de que la defensa de Bulnes pudiera acceder a la carpeta investigativa; es decir, cuando las partes aún no conocían la identidad de esos testigos.

Ante estos hechos, Raide está siendo asesorado por el abogado Juan Domingo Acosta, representante del Ministerio del Interior durante el caso Bombas y defensor de Rodrigo Hinzpeter en las dos acusaciones constitucionales que enfrentó.

Durante su paso por el INE, la comisión investigadora del Censo 2012 determinó en enero de 2014 que es “responsabilidad del ex director Francisco Labbé el no resguardar el secreto de los resultados del Censo antes que los difundiera el Presidente de la República, así como no proteger datos sensibles mediante las facultades y capacidades que entregó a funcionarios irregulares —Maximiliano Raide— y otros contratados a honorarios”.

Maximiliano Raide era asesor de Labbé, pero no era parte de la dotación del organismo, por lo que se creo un mecanismo para recibir un salario de $3,9 millones a través de otras personas.