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18 de Diciembre de 2012

Tras la masacre, los niños de Newtown vuelven a clases y luchan por recuperar la normalidad

Mientras las autoridades educativas deciden cuándo recuperar el funcionamiento de la escuela primaria de Sandy Hook, sus alumnos acudirán al Chalk Hill School en la cercana localidad de Monroe. Todos los alumnos de la localidad recibirán apoyo psicológico.

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Los seis colegios de Newtown, que han permanecido vacíos desde el tiroteo que se cobró la vida de 26 personas el viernes último , volverán a escuchar las voces de niños y profesores este martes a medida que la pequeña localidad del estado de Connecticut, hace esfuerzos por recuperar la normalidad.

Pero además de los sonidos de un día normal de colegio, los estudiantes también escucharán otros nuevos, como las palabras de los psicólogos o los pasos de los policías.

A sólo cuatro días de que Adam Lanza, de 20 años, irrumpiera en la escuela primaria Sandy Hook y abatiera a 20 niños de 6 y 7 años y a seis profesoras y personal de la escuela, ese colegio seguirá cerrado, publica El Universal.

Y es que la escuela es el sitio del crimen. Por ello la policía sigue entrando y saliendo, cruzando la fila de 26 árboles de Navidad que los visitantes han decorado con animales de peluche, flores y globos en los colores verde y blanco de Sandy Hook en homenaje a las víctimas.

La masacre -una de las peores en la ya trágica historia de tiroteos de Estados Unidos- ha conmocionado a los ciudadanos, ha llevado a varios congresistas a pedir mayores restricciones a la posesión de armas y ha animado a los directores de las escuelas a revisar sus protocolos de seguridad.

El teniente George Sinko admitió que será difícil calmar a los alrededor de 4.700 estudiantes y a sus familias. 

“Obviamente, va a haber mucha aprensión. Acabamos de pasar por una tragedia horrorosa. Teníamos bebés enviados a esa escuela que debían estar a salvo y no lo estuvieron”, afirmó el agente policial. “No puedes evitar pensar si esto podría pasar otra vez”.

Mientras las autoridades educativas deciden cuándo recuperar el funcionamiento de Sandy Hook, sus alumnos acudirán al vacío Chalk Hill School en la cercana localidad de Monroe.

La preocupación de Washington

En Washington, la masacre llevó el lunes al presidente Barack Obama a pedir un encuentro con asesores en la Casa Blanca para abordar modos de responder a lo ocurrido. Los planes del Gobierno de reducir la violencia no sólo incluyen medidas para controlar las armas, afirmó un portavoz.

La policía advirtió que podrían demorar varios meses en acabar su investigación sobre el ataque, que se desató cuando Adam Lanza mató a su madre, Nancy, en casa, antes de conducir a la escuela armado con un fusil Bushmaster AR 15 y dos pistolas. Tras matar a 26 personas en el colegio, se suicidó al escuchar la llegada de la policía. En total, murieron 28 personas.

Mientras tanto, este martes muchos de los estudiantes y profesores siguen acudiendo a los funerales de la víctimas. Los dos primeros tuvieron lugar el lunes. Noah Pozner y Jack Pinto, ambos de seis años, fueron enterrados en ataúdes blancos. El martes James Mattioli y Jessica Rekos, ambos de seis años, serán enterrados.

“No es real, mi pequeña, que estaba tan llena de vida y que quiere un caballo y que va a tener botas de vaquera en Navidades, que no vaya a volver a casa”, dijo la madre de Jessica, Krista Rekos, el lunes en la cadena ABC News.

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