El debate sobre planificación urbana que se inició a raíz del incendio en Valparaíso

La tragedia que asoló a Valparaíso este fin de semana, con más de 2 mil viviendas calcinadas, reflotó el debate sobre la falta de políticas públicas de ordenamiento territorial y planificación urbana en la ciudad puerto.

Las tradicionales casas colgando de cerros que en sus laderas se llenan de basura, sumado a los fuertes vientos y las sequías, son un explosivo cocktail para la generación de los incendios que históricamente han azotado a la ciudad.

A este escenario se suma, a juicio del experto en gestión de emergencias Michel de ‘Herbe, la falta de cortapisas para la construcción de viviendas en quebradas y laderas de difícil acceso y sin preparación para estas emergencias.

“La autoridad política, desde hace décadas, ha permitido la ocupación de terrenos que están debidamente normados de que no puede haber construcciones”, dijo a La Tercera.

Agregó que “no estamos frente a un gran desafío en términos de nueva normativa en planificación territorial” sino que “hay que aplicar la normativa”.

“Es un tema que ocurre a vista y paciencia de la autoridad y lo complejo es que la autoridad hace caso omiso y eso es algo que se ha transformado en costumbre en la planificación territorial”, dijo.

En una línea similar se pronunció el arquitecto y urbanista, Iván Poduje, quien señaló que la responsabilidad del Estado se traduce en “en no disminuir el riesgo que genera en las personas el asentamiento en zonas precarias”.

La ministra de Vivienda, Paulina Saball, matizó las críticas y recalcó que “es una ciudad enclavada entre cerros. Se puede regular de una mejor forma, plantear exigencias que sean más pertinentes, pero esta es una ciudad que tiene esas características y lo que nos corresponde es asumirlas y plantear estrategias que permitan generar seguridad y calidad dentro de la realidad de la ciudad”.

El alcalde de Valparaíso, Jorge Castro, sin embrago, replicó estas críticas y dijo que el incendio “ha afectado a poblaciones que estaban con toda su situación saneada y otras en proceso de inscripción”.

Según el último Plan Regulador, dijo, los cerros afectados están en el área urbana. “Gran parte de esos barrios, casi todos, estaban en regla”, señaló, y agregó que “los que dicen que esa gente no debería estar ahí es no conocer la ciudad. Yo vivo en un cerro. La gente vive en los cerros y sus condiciones están saneadas… Pero quien dice que esa gente debe salir de ahí o no debería haber estado, habla sin saber”.