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2 de Junio de 2015

Shell asegura que en 35 años más los vehículos no necesitarán gasolina

La multinacional dejará de producir combustible en 2050 y se dedicará al hidrógeno, asegura un científico de la empresa.

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En el año 2050, cuando se calcula que el número de vehículos en el mundo sea de 2 mil millones, más del doble de los 900 millones que hay actualmente circulando en las calles, las refinerías dejarán de producir combustible para el transporte y deberán cerrar sus plantas de producción para motores de combustión, debido a que los autos serán eléctricos.

Esto es lo que asegura uno de los ingenieros de la automoción más reconocidos del mundo, el alemán Wolfgang Warnecke, perteneciente al área de movilidad de Shell.

El científico y conocedor de la industria, asegura que dentro de 35 años “todos los vehículos producirán cero emisiones en el medio ambiente” porque “el fin de los motores de combustión” dará paso a los “motores eléctricos con células de combustible”. “Eso significará un cambio dramático en la industria”, sostiene.

Este cambio que predice Warnecke provocará una transformación a gran escala y afectará a petroleras, refinerías, gasolineras y fabricantes de automóviles.

“En 2050, las refinerías no producirán gasolina para el transporte nunca más. Tendrán que cerrar sus plantas de producción para motores de combustión”, asegura el científico, según consigna El Mundo.

“En el caso de Shell, por ejemplo, no creará combustible pero sí hidrógeno”, anuncia, y detalla que el la compañía está participando de un proyecto, liderado por el gobierno alemán, con el objetivo de crear 400 estaciones de hidrógeno en el país de aquí a 2023.

Warnecke es una de las principales figuras de la Eco-Marathon europea que se está realizando en Roterdam, Holanda, donde ingenieros de 30 países compiten por cuál es el automóvil que consume menos combustible.

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Para poder conseguir un auto que sea 100 por ciento limpio  hay que recorrer un largo camino, y más aún si se busca que la población cambie los actuales por la nueva generación de transporte. Para lograr esto, el científico explica que “la energía que utilicemos tendrá que venir de fuentes renovables, solar o eólica, o de biocombustibles”.

En la actualidad hay dos opciones para la utilización de vehículos limpios. La primera es el uso de energías renovables para producir hidrógeno “verde”, el que es almacenado en una botella de gas guardada en el vehículo. “Esto es lo que ya vemos”, asegura.

La otra alternativa consiste en utilizar la electricidad producida por las Energías Renovables No Convencionales (ERNC) para cargar las baterías de los autos.

“En una variante almacenas la energía en la batería y en la otra, en el hidrógeno”, detalla. “Son las dos únicas opciones que hoy permite la tecnología para tener un vehículo 100 por ciento libre de emisiones”, resalta Warnecke.

Según prevé el científico, la reducción de los costos y la mejora de la eficiencia de la electricidad renovable permitirá acelerar la implementación de vehículos limpios en la industria del transporte privado y público.

“El mundo se está volviendo tan complejo, con tantos retos, que nunca más una única compañía tendrá el poder para hacer todo por sí sola”, concluyó.

 

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