Maduro se une a larga lista de dictadores investigados por la Corte Penal Internacional
Según el informe, el régimen venezolano, encarcela, tortura, ejerce violencia sexual y persigue a disidentes políticos.
Por Gabriela Romo
La sentencia máxima de la CPI es de 30 años de cárcel. Foto: @Mippcivzla
En la misma lista que los dictadores Slobodan Milosevic de Yugoslavia, Muammar Gaddafi de Libia y Laurent Gbagbo de Costa de Marfil, entre otros, todos acusados por crímenes de guerra, contra la humanidad y genocidio, está Nicolás Maduro, cabecilla del régimen venezolano.
Según un informe de la Corte Penal Internacional (CPI), al menos desde abril de 2017, autoridades civiles, miembros de las fuerzas armadas e individuos a favor del régimen venezolanos, son culpables de “encarcelación, tortura, violencia sexual y persecución de un grupo o colectividad en motivos políticos”.
En un comunicado, el órgano internacional enumeró las fuerzas de seguridad del régimen de Maduro cuyos miembros son responsables de los crímenes, entre los que destacan “la Policía Nacional Bolivariana (“PNB”), el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (“SEBIN”), la Dirección General de Contrainteligencia Militar (“DGCIM”), la Guardia Nacional Bolivariana (“GNB”) y otras unidades de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (“FANB”)”.
El documento también hace referencia a las milicias paramilitares al servicio de la dictadura, conocidas como “colectivos”, e indica que actuaron “junto con miembros de las fuerzas de seguridad o con su consentimiento”.
Ahora, el documento se encuentra bajo el análisis de la Fiscalía de La Haya, ya que la Corte Penal Internacional es un tribunal de última instancia que sólo interviene cuando los Estados no llevan a cabo investigaciones fehacientes sobre los crímenes denunciados.
La sentencia máxima de la CPI es de 30 años de cárcel y en circunstancias excepcionales se puede dictar cadena perpetua.
La determinación de la Corte Penal Internacional coincide con aquellas de otros organismos internacionales como la ONU y la OEA, quienes han indicado que “Maduro tiene responsabilidad directa en crímenes de Lesa Humanidad” cometidos desde 2014.
