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10 de Febrero de 2011

Medio mexicano destaca "ruta turística en Lota" recordando a los "33"

El periódico mexicano Mileno, acaba de hacer una nota sobre las visitas de turistas al Chiflón del Diablo, Lota, recordando lo que fue el rescate de los "33". Aquí un extracto del artículo titulado, "turistas en Chile pueden ser mineros por un día":

 

Chile, donde el año pasado se produjo el espectacular rescate de 33 hombres atrapados en un yacimiento, ofrece a los turistas la oportunidad de experimentar cómo se trabajaba en la oscuridad del Chiflón del Diablo y así saber qué sienten los mineros en la profundidad de la tierra.

 

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El periódico mexicano Mileno, acaba de hacer una nota sobre las visitas de turistas al Chiflón del Diablo, Lota, recordando lo que fue el rescate de los “33”. Aquí un extracto del artículo titulado, “turistas en Chile pueden ser mineros por un día”:

 

” Chile, donde el año pasado se produjo el espectacular rescate de 33 hombres atrapados en un yacimiento, ofrece a los turistas la oportunidad de experimentar cómo se trabajaba en la oscuridad del Chiflón del Diablo y así saber qué sienten los mineros en la profundidad de la tierra.

 

La mina, clausurada hace 14 años, fue bautizada así por el silbido del viento que entraba en las galerías, se ubica en la población de Lota, y se introduce por debajo del océano Pacífico.

A la entrada, Roberto Rojas, quien fue minero hasta hace poco más de una década, equipa a los turistas con un casco y una batería ligada a un cinturón que permite alimentar la linterna.

 

En una cápsula metálica y en grupos de cinco, los visitantes descienden apretujados durante un minuto en completa oscuridad hasta unos 50 metros de profundidad, donde el ambiente es frío y húmedo. “Así es como se sentían los mineros”, reflexiona uno de los pasajeros mientras desciende, en referencia al rescate en octubre de los 33 mineros, que se hizo a través de una cápsula en la cual, uno a uno, fueron izados desde una profundidad de 600 metros.

 

En la galería se ve una jaula oxidada. “Es la jaula de un pajarito, servía para detectar si había grisú (gas metano), un gas inodoro que puede matar. Cuando el pajarito moría, se gritaba ¡grisú! Y todo el mundo corría para arriba”, cuenta Rojas, quien lleva un metanómetro en la mano, la versión moderna del pajarito”.

 

Vía Turistas en Chile pueden ser mineros por un día en http://www.milenio.com

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