“Mujer de Esfuerzo”: líderes sin sueldo

Por Natalia Cantillana, Benjamín Fernández y Carmen Loyola, estudiantes de Periodismo UC

Una cancha de fútbol, una sede social con una biblioteca que se está formando, y 150 familias con casa propia -de dos pisos y 51 metros cuadrados-, así luce el condominio “Mujer de Esfuerzo” en la actualidad. Pero a diferencia de lo bien que se ven sus casas, las dirigentas Ana y Jacqueline hoy muestran un semblante cansado. Después de años de trabajo para conseguir la casa propia, les cuesta pensar en un nuevo período de liderazgo. Ahora surge una nueva líder, Silvana Soto, que está trabajando codo a codo con la Municipalidad de Renca.

En otra comuna de la Región Metropolitana, Peñalolén, la realidad es parecida. Ser dirigenta social no es sólo un cargo, es una responsabilidad con la se vive las 24 horas del día y los siete días de la semana. Gestionar reuniones con las autoridades y ganarse la confianza de los vecinos es clave para avanzar en la metas de la comunidad. Gina Rodríguez -dirigente del campamento de Peñalolén- hace dos años que trabaja con su directiva para conseguir la casa propia. Gina asegura que  ha vivido promesas y estafas de dirigentes que sólo han lucrado con el cargo. “A mí me ofrecieron irme del campamento con toda mi familia. Pero hay más familias que están igual que yo, por lo que decidimos quedarnos y comencé a trabajar como dirigente pero con un proyecto real y concreto”, cuenta Gina.

Esta dirigenta pertenece a un campamento emblemático en Peñalolén, y su labor ahora se centra en conseguir la casa propia de la mayoría de familias del lugar, ya que ella trabaja con los que quieren salir del sitio que los ha albergado por 13 años. “El estado debería regular a los dirigentes, cualquier persona puede ser y muchas veces estafan a la gente por beneficio propio”, aclara.

A diferencia de ella, después de casi dos años de estar viviendo en sus casas, los conflictos para las dirigentas Ana y Jacqueline no son menores. El barrio dividido con nuevos liderazgos, el cansancio familiar, sumado al poco apoyo de la municipalidad, están agotando la labor de estas mujeres.

Para ellas conseguir este anhelado sueño no fue cosa fácil, y mucho menos lo fue para sus familias, quienes veían cómo sus esposas y madres se pasaban muchas horas fuera de casa. Ana es madre de tres hijos y tiene un nieto. Declara que a lo largo de estos años ha trabajado por todos en el condominio, aún cuando esto le haya traído algunos problemas familiares. Frente a este tema, una de sus hijas es tajante al decir que no le gusta que su madre dedique tanto tiempo a la presidencia del condominio. Sin embargo, Ana afirma que pese a que sus hijos o su marido no aprueban su trabajo, ella igual seguirá adelante. Por lo menos, hasta que dure su mandato.

Jacqueline Inostroza, de más bajo perfil, es la Secretaria de la Junta de Vecinos, y comenta que su familia sí la apoya en la labor que realiza. Cuenta que ni su familia ni la de Ana se imaginan que son ellas mismas -con su propio dinero- las que pagan las cuentas de agua y luz de la sede que utilizan todos sus vecinos. Por su parte, a los hijos de Jacqueline, de 12 y 14 años, tampoco les gusta este rol tan visible que ha tomado su madre, pues han recibido malos comentarios de otros niños. Por todas estas cosas se siente cansada y considera que en noviembre no debiera seguir en la directiva.

 

Dirigente social: un cargo mayoritariamente femenino

Respecto al intenso rol que están desarrollando a lo largo del país los dirigentes sociales, la socióloga Magdalena Mozó cuenta que por su experiencia en Un Techo para Chile, donde trabajó en conjunto con la Corporación de Dirigentes “También Somos Chilenos”, ha observado que en su mayoría son las mujeres quienes asumen la responsabilidad de ser dirigentes sociales. Para ella, esto podría deberse a que “en su mayoría quienes postulan a subsidios son familias monoparentales, es decir que hay sólo una persona a cargo, y cuando eso pasa, en general es una mujer la que está al frente”.

Otra de las teorías que postula Mozó sobre la mayor participación femenina en este rol, es que aún vivimos en una sociedad muy machista, en la cual es el hombre quien debe salir a trabajar y por ende la mujer tiene más tiempo para dedicar a estas actividades. Según Mozó, este fenómeno pasa muy seguido, ya que la mujer muchas veces debe consultarle a su esposo la posibilidad de tener un rol más activo de participación. “Muchas veces la negociación es que mientras ella no deje las tareas del hogar -básicamente que haya comida todos los días-, puede hacerlo. Hay veces en que esto es un tema de conflicto en las parejas”, indica la socióloga.

Viaje a las estrellas

El intenso trabajo de Jacqueline y Ana no terminó con la entrega definitiva de sus viviendas, pues en la actualidad ellas aún continúan desarrollando actividades que buscan mejorar el espacio comunitario y contribuir a un mejor desarrollo de los niños en el condominio. Un claro ejemplo de esto es la reciente inauguración de una biblioteca dentro de la sede comunitaria, la que se gestó con la ayuda de la Fundación Gestión Vivienda, quienes comenzaron a trabajar con los vecinos cuando era una Entidad de Gestión Inmobiliaria Social (EGIS). Después de la inauguración del condominio, la relación se mantuvo y hoy los ayudan consiguiendo más donaciones para la biblioteca.

Uno de los socios de la fundación, es el astrónomo Fernando Selman, quien trabaja hace diez años en el European Southern Observatory -Observatorio Europeo Austral- estudiano las estrellas al momento de su formación. Selman, de 54 años, conoció el condominio “Mujer de Esfuerzo” porque uno de los hijos de su esposa era parte del directorio de la Fundación Gestión Vivienda y un día, recibió un mail de la fundación en la que se pedía colaborar con libros para la nueva biblioteca de Mujer de Esfuerzo. Ese fue el momento en que Selman quiso conocer el condominio. “Yo no quería utilizar esto como una posibilidad de deshacerme de cosas en la casa. Yo quería ver quiénes iban a  recibir los libros, conocer a las personas que estaban detrás de esta donación. Me interesó ir personalmente”. Al conocer el condominio se entusiasmó tanto, que se le ocurrió hacer una nueva actividad. “Soy un convencido de que hay que ayudar a los que quieren ayudarse, entonces ofrecí juntarnos una tarde para hacer una actividad para que la gente del condominio conociera las estrellas”, dice.

Selman trabaja desde 2004 en el observatorio Paranal y decidió introducir a los niños del condominio en el mundo de la astronomía. “Llevamos un telescopio, pero no sólo fue eso. La comunidad participó pintando planetas y se entusiasmaron con el tema. Creo que muy pocos habían visto un planeta o mirado por un telescopio, era algo totalmente nuevo para ellos. Los niños estaban fascinados, ese día les mostramos Venus y Júpiter”, recordó el astrónomo.

Para esta actividad, pidió la ayuda de los jóvenes que trabajan junto a él en el observatorio y señala: “Cuando ofrecí la actividad me di cuenta que habrían niños de cinco años. Ahí me bajo el pánico porque no tenía la experiencia de hablarle a niños tan pequeños. Pedí ayuda a los estudiantes del observatorio, ya que algunos habían hecho este tipo de actividades en Europa”. Selman ha seguido colaborando en el proyecto: donó computadores a la biblioteca y desde el condominio “Mujer de Esfuerzo” aseguran que en el futuro llegarán muebles para los computadores.

Los problemas con la municipalidad

A pesar de todo lo que han conseguido a lo largo de estos años,  la actitud de Jacqueline y Ana ha cambiado con el paso del tiempo, lucen más cansadas y desgastadas. Tantas discusiones sin sentido con los vecinos sobre comentarios que les llegan a sus oídos. Tanto trabajo gratuito que no es valorado. Las dirigentes de “Mujer de Esfuerzo” aseguran que están agotadas. “Nosotros tenemos nuestro cargo hasta noviembre, ahí hay que llamar a nuevas elecciones. El trabajo es bien desgastante y pese a que uno lo hace con mucho cariño, constantemente está recibiendo críticas o reclamos. En la casa, mis hijos lo único que quieren es que no me repostule”, dice Jacqueline, secretaria de la Junta de Vecinos.

En el condominio sólo siete hombres son los propietarios de sus casas. El resto, 143 familias, son lideradas por mujeres, por lo que el nacimiento de nuevos liderazgos femeninos es inminente. En esta etapa de transición que hoy se vive en “Mujer de Esfuerzo” una nueva líder se vislumbra en el camino. Ella es Silvana Soto, una mujer que ha comenzado a desarrollar gestiones que van en directo beneficio de algunas casas del condominio. En noviembre son las elecciones. “Las nuevas dirigentes que vengan deben tener mucha más energía, pero que trabajen para todos, no para dos o tres personas”, dice Ana. En la actualidad, Silvana está a cargo de 54 casas que quieren postular al mejoramiento de vivienda. Incluso, cada vez son más las vecinas que se le acercan para pedirle ayuda. Silvana no descarta postular a la presidencia del condominio en noviembre ya que su cercanía con la Municipalidad de Renca es vital para agilizar los trámites.

Hugo Espinoza, jefe de las Organizaciones Comunitarias de la municipalidad, afirma que han tenido una cercanía grande con todos las dirigentas sociales de la comuna. “Estamos muy contentos que ellas hayan logrado su casa propia. De hecho nosotros las apoyamos en todas sus iniciativas como: realización de bingos o viajes al litoral”, agrega Espinoza. Para él, Silvana está trabajando por el mejoramiento de las viviendas y reconoce que sí la han apoyado en esta labor.

Los escasos recursos que tiene la comuna se dividen en todos los sectores por igual. “Nosotros no hacemos diferencias políticas al momento de trabajar con las comunidades, es un encargo de nuestra alcaldesa”, dice Espinoza. La alcaldesa Vicky Barahona tiene un proyecto que consiste en que llegue internet a todos los lugares de la comuna. En este tema,  Jacqueline discrepa, porque ha mandado cartas para la instalación de internet en la biblioteca y luego de dos meses no ha tenido respuesta. Según Ana, la ayuda que han recibido de parte de la municipalidad ha sido insuficiente.

Actualmente el condominio “Mujer de Esfuerzo” trabaja en varios proyectos. Uno es la instalación del servicio de internet Wi-fi para los computadores de la biblioteca. Otra iniciativa es terminar el enrejado de la cancha del condominio, renovando por completo la infraestructura. Para esos avances, los vecinos necesitan contar con los recursos necesarios para poder llevarlos a cabo, los que se encuentran gestionándose al interior de la municipalidad. Sin embargo, las votaciones para elegir a la próxima directiva se realizarán a fines de este año, por lo que surge la interrogante de cuál de todas estas “Mujeres de Esfuerzo” será la que corte la cinta.