UDI descartó que “donativos” de tabacalera influyerá en su rechazo a Ley Antitabacos

Gustavo Hasbún, jefe de la bancada de diputados UDI, descartó que el rechazo que en su momento tuvo el gremialismo con la Ley Antitabaco fuera influido por los aportes monetarios que la industria tabacalera entregó al Instituto Libertad y Desarrollo (LyD) en plena discusión parlamentaria.

Según informó Ciper Chile, British American Tobacco Chile -ex Chile Tabacos- realizó una serie de traspasos de dinero a LyD, cuyos parlamentarios “no sólo retrasaron la votación de la ley, sino que también se opusieron en su mayoría y de manera sistemática a varias de las restricciones que el proyecto de ley finalmente aplicó a las tabacaleras”.

“Entre ellas se cuentan la prohibición de fumar en espacios cerrados, los límites a la publicidad principalmente indirecta (promociones y placement) y la obligación de las tabacaleras de informar sobre sus donaciones”, consigna el medio.

Esto, ya que el presidente de Libertad y Desarrollo es el ex ministro de Hacienda e Interior de la dictadura, Carlos Cáceres, quien además la cabeza de la ex Chile Tabacos, la cual también ha realizado cuantiosos “donativos” a la Universidad del Desarrollo. 

En vista de esta situación, Hasbún recalcó que “todas las decisiones que nosotros tomamos en la bancada de la UDI no tienen nada que ver con los informes que ellos (LyD) pudieron haber entregado”.

“Este tipo de situaciones generan confusión en la opinión pública y deberían ser donaciones mucho más transparentes. De ser cierto que (el aporte económico) se hizo durante ese periodo me parecería gravísimo que algún instituto de estudios que haya hecho algún informe favorable haya recibido algún tipo de ayuda económica al momento en que se estuviera tramitando el proyecto de ley”, declaró a Cooperativa.

El rechazo de la UDI a algunas de las restricciones que contenía la iniciativa le valieron incluso críticas de La Moneda, donde el ministro Jaime Mañalich atacó al gremialismo indicando que “el lado oscuro de la fuerza se mueve muy vigorosamente y hay un lobby muy intenso para demorar la aprobación de este proyecto y que, en definitiva, la industria tabacalera siga operando como lo está haciendo, con tantos márgenes de libertad”.