Los completos mojados de Talca sufren las consecuencias de la crisis del coronavirus
Las situación sanitaria obligó a los dueños de los carritos a aplicar estrictas medidas, las que han impactado a una actividad que venía debilitada desde el estallido social.
Por Sebastián Dote
La crisis sanitaria por el coronavirus ha golpeado fuertemente a la industria gastronómica nacional, perjudicando el funcionamiento de varios negocios emblemáticos como los famosos carritos de completos mojados de la ciudad de Talca.
Es que la propagación de la COVID-19 llevó a que las autoridades de la Región del Maule obligaran a los administradores de los famosos puestos, ubicados en las calles 5 Oriente con 2 Sur y 6 Oriente con 2 Norte, a cambiar su modalidad de atención.
Según lo consignado por El Centro, lo primero que se definió fue el retiro de los asientos en los kioscos, con lo que se concretó la prohibición de consumo en los puestos. Debido a esto, los locatarios debieron seguir trabajando bajo la modalidad “solo para llevar”.
También se delimitó el horario de funcionamiento, ya que la apertura es de lunes a sábado, desde las 08.00 horas hasta las 17.00 horas, mientras que los domingos estarán cerrados.
La acción, eso sí, no ha generado un cambio importante en el comportamiento de la gente, ya que si bien no puede comer junto a los kioskos, al momento de comprar su completo muchos se sientan en el entorno sin respetar las medidas de distanciamiento social.
Los locales habían tomado sus respectivas medidas como la separación los asientos, además del uso de mascarilla, guantes e higienización frecuente de los establecimientos. Pero la propagación del virus en la zona llevó a que las autoridades endurecieran las prohibiciones.
“Fue por disposición del Ministerio de Salud. Si no sacábamos los asientos era multa y cerraban el local. Esto fue para todos los locales. Solamente debemos vender para llevar”, expresó Gloria Méndez, una de las locatarias de los carros al matutino talquino.
La mujer reconoció que la pandemia y el estallido social han provocado estragos en el desarrollo de su negocio. “Nos afecta en el sentido que la gente, casi todas, trabajan por acá cerca y almuerzan su completo, ya que es la comida más barata de las personas. Ahora deben comprar y llevárselo al mismo trabajo. El 80% de las ventas ha disminuido”, expresó.
La Seremi de Salud del Maule ha cursado 39 sumarios sanitarios en la región, fiscalizando no solo los carritos de completos de Talca, sino que también restoranes en las otras provincias.
