Estos son los 5 alimentos que no necesitan ser refrigerados (aunque te suene extraño)

No somos pocos los que tenemos la manía de estar pendiente que los alimentos se mantengan en una condición adecuada de almacenamiento, y una de las maneras de hacerlo, según nosotros, es meter todo al refri.

Pero ¿qué tanto esa acción beneficia a los alimentos en su conservación libre de microorganismos? Ante esta consulta, BBC Mundo entrevistó a varios expertos sobre el tema.

Lo primero que hay que tener en cuenta es que la refrigeración lo que hace es evitar la oxidación, sin embargo, en algunos casos donde el sabor y el aroma son importantes, la nevera no es buena idea.

Victoria Moreno, directora del Instituto de Investigación en Ciencias de la Alimentación en España, afirma que entre los productos que no debieran estar en la nevera se encuentran el chocolate, algunos quesos y los frutos secos.

Queso

Según Moreno, algunos quesos del tipo seco no deberían ir nunca al refri. “Además de quedar como piedra si se meten en el frigorífico, el frío les hace perder sus cualidades”. Por ello en muchas ocasiones lo aconsejable es solo dejarlos en un lugar fresco sin mucha humedad, para así evitar la aparición de hongos.

Frutos Secos

Otro alimento que no se debiera congelar son los frutos secos, esto porque ” la textura y las propiedades aromáticas de los frutos secos se paralizan con el frío”, señala el artículo.

Chocolate

También en esta lista esta el café y el chocolate, esto porque el frío es perjudicial para el sabor, además que pueden adquirir muy fácilmente el sabor de otros alimentos.

Papaya

Las frutas sub-tropicales como la papaya también pueden ser muy susceptibles al frío. “Las bajas temperaturas debilitan sus tejidos e impiden que continúen desarrollando los procesos metabólicos normales que las caracterizan. Esto ocasionará daños en la superficie, decoloración interna, aparición de agua, pérdida de sabor e imposibilidad para que prosiga su proceso de maduración natural”, señala el artículo de la BBC.

Mantequilla

Uno de los elementos más comunes de ver en una nevera es la mantequilla, pero a pesar de que se trata de un producto lácteo, refrigerarla no es la mejor opción cuando se quiere conservar su sabor. También se señala que “en su composición hay mucha grasa, lo que hace que no sea particularmente propensa al desarrollo microbiano”.