Secciones El Dínamo

cerrar
Cerrar publicidad
Cerrar publicidad
1 de Septiembre de 2013

La historia tras el retrato: Corresponsal cuenta cómo fue el día en que fotografió a Pinochet

Cuarenta años después de capturar la imagen que dio la vuelta al mundo, el holandés Chas Gerretsen recuerda sus vivencias en Chile.

Por
Compartir

El corresponsal holandés Chas Gerretsen, en una entrevista realizada por La Tercera, recuerda que el 19 de septiembre de 1973 llegó a la Iglesia de la Gratitud Nacional para cubrir el Tedeum realizado por el Cardenal Raúl Silva Henríquez y al que asistiría la Junta Militar en pleno.

Todo el templo estaba rodeado de militares y en su interior, frente al altar, estaban sentados Augusto Pinochet Ugarte, José Toribio Merino, Gustavo Leigh Guzmán y César Mendoza Durán. Junto a ellos estaban los ex presidentes Eduardo Frei Montalva y Jorge Alessandri.

En esa época Gerretsen tenía 30 años, trabajaba para la agencia Gamma y para la revista Time como corresponsal y fotógrafo de conflictos. “Cuando terminó la guerra de Vietnam me quedé sin trabajo. Por referencia de conocidos viajé a Argentina en barco, pero allá me dijeron que ya había demasiados fotógrafos y que mejor probara suerte en Chile”, y así llegó a Santiago el 8 de enero de 1973.

“No sabía nada de Chile. No conocía a Salvador Allende. Yo estaba buscando una guerra. Venía de una y buscaba otra. Era un fotógrafo de conflictos y cuando llegué no sentí ni percibí nada, al principio”, afirma. Pero con el paso de los meses recuerda que se fueron intensificando las manifestaciones callejeras y las colas para buscar alimentos, hasta que llegó el día del Tanquetazo y finalmente el 11 de septiembre, donde fotografió lo sucedido y escribió todo lo que vio.

El día del Tedeum “yo quería algo distinto, así que resolví fotografiarlos uno por uno. En close up. Como en un retrato. Cuando me acerqué a tomar la foto del general Pinochet, quienes lo rodeaban le sugirieron que se sacara los lentes que tenía puestos, pero él no les hizo caso y les respondió: ‘Yo soy Pinochet’, y se los dejó puestos”.

En octubre de 1973 “me fui porque Chile ya estaba terminado y yo me empezaba a sentir poco querido. Los militares pensaban que yo era un problema, un pain in the ass. Los derechistas pensaban que era comunista, y los de izquierda creían que como era rubio y de ojos azules era fascista”.

“Esa fotografía cambió mi vida. Pasé de ser un fotógrafo más de los que hacen prensa, de guerra, de conflictos, a ser un profesional destacado y reconocido en el mundo”, recuerda el corresponsal, quien prepara una exposición para fines de 2014 o principios de 2015 en conjunto con el Museo de la Memoria.

 

Léenos en Google News

Notas relacionadas

Deja tu comentario

Lo más reciente

Más noticias de País