Defensor Nacional: “El alcotest no tiene la precisión de un examen de alcoholemia”

El pasado lunes 22 de octubre, al juez Patricio Souza, del 14° Tribunal de Garantía de Santiago, le correspondió encabezar la formalización del ex futbolista Manuel Neira, detenido el día anterior por conducir en estado de ebriedad. El alcotest que le aplicaron los carabineros de la 36° Comisaría de La Florida arrojó 5,0 gramos por litro de sangre.

Sin embargo,el magistrado no sólo no concedió la prisión preventiva solicitada por el fiscal contra el imputado, sino que criticó abiertamente los resultados que han mostrado los últimos alcotest que se han hecho públicos.

En este contexto, el Defensor Nacional, Georgy Schubert, dio a conocer la postura de la Defensoría en este tema, dado que finalmente esta es la institución la que debe representar a buena parte de los imputados por estos delitos.

“Creemos que el alcotest -y eso es claro desde hace bastante tiempo- no tiene la precisión que tiene un examen de alcoholemia”, explicó Schubert. Además aclaró que en algunos casos los alcotest pueden tener problemas de mantención o de calibración, aunque no siempre es así.

“Cuando uno ve una alcoholemia con 5 gramos por mil de alcohol en la sangre, o de cuatro puntos y tanto, son muy poco frecuentes dentro de la experiencia de años que tenemos. Y ya hay un caso en que el alcotest marcó una cifra y la alcoholemia una mucho menor, y por tanto hay un aspecto técnico que se debe precisar, porque efectivamente lleva a dudas. La alcoholemia, el examen que hace el Servicio Médico Legal, es muchísimo más precisa que esto, que parece ser una prueba indiciaria”, explicó.

Un primer filtro

Schubert, coincidió con la Directora Nacional del Servicio Nacional para la Prevención y Rehabilitación del Consumo de Drogas y Alcohol (Senda), Francisca Florenzano, en el sentido de que el alcotest es sólo un tamizaje o un primer filtro para reflejar el grado de consumo alcohólico de un conductor, aunque consideró que algunos de ellos “presentan dificultades”, de modo que “no se debe tener tanta confianza en lo que indica el alcotest”, sin perjuicio de que los procedimientos policiales que los incluyen sigan adelante.

El Defensor Nacional agregó que si bien la Defensoría ha analizado jurídicamente el debate de fondo sobre la legalidad de algunas alcoholemias aplicadas por funcionarios de servicios médicos privados, “no hemos tomado una postura institucional, porque nos parece que hay situaciones bastante distintas. Por ejemplo, en regiones habría casos de personas que toman la alcoholemia que no serían funcionarios del Servicio Médico Legal. Por tanto, en cada caso particular los defensores públicos señalarán las argumentaciones de defensa que correspondan”.