En 2009, Tomás González recibió una importante donación que le permitió continuar su carrera deportiva defendiendo a Chile. El empresario Leonardo Farkas le pasó 80 millones de pesos en equipamiento con dos compromisos: que el gimnasta siguiera representando al país y que luego ayudara a nuevas promesas nacionales del deporte.
Siete años después, González inauguró una Escuela de Gimnasia en la Ciudad Deportiva de Iván Zamorano y cumplió así una de sus promesas. Sobre este tema se refirió la maratonista chilena Erika Olivera, la deportista que más veces ha representado a Chile en los Juegos Olímpicos y que este año va por su quinta participación.
Olivera dijo sobre el gimnasta: “Me parece estupendo lo que hace. Yo también tengo escuelas, pero yo no pediría ni aceptaría ayuda de Leonardo Farkas. Y agregó: “Es muy bonito que él (Farkas) ayude, pero no le corresponde, no es rol del empresariado, esa es una misión que deba cumplir el Estado”.
Junto con Natalia Ducó y Francisca Corvetto, es una de las candidatas para ser la abanderada chilena en estos Juegos Olímpicos, que este año será elegida a través de votación popular vía web. “Cumplo con todos los requisitos y he sumado estar muchos años en la alta competencia. Ellas también tienen sus méritos, pero reconozco que me siento merecedora de portar la bandera. Dediqué 24 años a representar a Chile, más de la mitad de mi vida”, dice Olivera, quien también podría postularse a diputada apoyada por RN el próximo año.