El cáncer es una de las principales causas de muerte en el mundo. Una enfermedad que no discrimina clases sociales ni edad y que, además, puede cambiar la vida tanto del afectado como de la familia.
Esto sucedió con AJ Spader, un joven de 15 años que sorprendió a sus padres cuando les anunció que asistiría al baile con su hermana Rebekah, de 10 años, para que de esa manera atesorar un bello recuerdo.
El joven se acercó a sus padres y les dijo que lo hacía porque “Rebekah podría no tener su propio baile”, explicó Stephanie Spader, la madre de AJ a la cadena de televisión ABC News, agregando que “él quería darle a ella esa experiencia”.
Según cuentan sus padres, el joven quería entregarle ese regalo a su pequeña hermana, justificando lo que iba a hacer con el lema familiar “Intacto, valiente y bendecido” el que escribió en un cartel para invitar a la niña, quien aceptó.
“Lo más probable es que ella no viva el instituto. Así que pensé en pedirle a ella formalmente que fuera conmigo”, contó AJ, quien agrega “quiero pasar con ella tanto tiempo como pueda mientras esté bien”.
La niña sufre de mielodisplasia, desde hace cuatro años, donde han intentado sacarla adelante a través de distintos tratamientos, entre ellos un trasplante de medula ósea el que finalmente no funcionó.
Ambos hermanos tienen una relación muy estrecha señalan los padres quienes afirman además que “él tiene un gran corazón. Él quería que ella tuviera algo que no vivirá”.
