The xx, la esencia se mantiene

Hace un par de años, Mondo Sonoro, el sitio español de prensa musical especializada, los catalogó como la familia Addams del pop británico. Es probable que aquel apodo fuera por sus apariencias, siempre vestidos de negro, con un look casi gótico, una actitud tímida y huraña; pero sobretodo por su música oscura, íntima y melancólica.

The xx, el trío inglés del momento, está compuesto en la voz y guitarra por Romy Madley Croft, sucesora indiscutible de Tracey Thorn —Everything but the girl—, Oliver Sim en voz y bajo eléctrico; y Jamie xx a cargo de las bases y producción musical. El mundo tiene los ojos puestos sobre los ganadores del Mercury Prize del 2010, por su debut “xx” (2009), debido a que el 13 de enero pasado lanzaron su tercer disco, “I see you”, después de cinco años de silencio musical.

La nueva entrega de la agrupación originaria del suroeste de Londres, incluye diez canciones que han sido promocionadas como más festivas y luminosas que sus trabajos anteriores. Algo de eso hay, especialmente en el arranque con las sorpresivas trompetas de “Dangerous”, la delicadeza de “Say something loving” y el primer single lanzado hace un par de meses, “On hold” —cuyo sampler en el coro corresponde a un segmento de la canción “I can’t go for that (no can do)” de los ochenteros Daryl Hall & John Oates y que, por lo demás, arruina completamente el estribillo—.

La estética de su carátula conserva la emblemática x, no obstante conlleva un mensaje de mayor importancia. Pasaron del negro profundo de su debut a un plateado que deja ver un cielo azul y la silueta de los tres integrantes, un espejo que refleja lo que son en la actualidad. Hoy sonríen más, se presentan en shows de televisión, Oliver Slim (26) está rehabilitado de su adicción al alcohol, además de ser rostro de una campaña publicitaria para Dior. Romy (27) está convertida en ícono gay y acaba de anunciar su compromiso con la diseñadora Hannah Marshall, con quien ha pasado largas temporadas en la soleada ciudad de las palmeras, Los Ángeles, CA. Y por último, Jamie xx (28) lanzó un disco solista, “In colour” (2014), cuya promoción lo llevó a girar por grandes festivales electrónicos europeos junto con remixar a artistas tales como Adele, Radiohead y Florence + the Machine.

Gracias a lo anterior, los inseparables amigos, dan un paso más y presentan un indie pop mucho menos depresivo y nostálgico para alcanzar mayores niveles comerciales que coquetean con el pop bailable. Igualmente, disfrazan su esencia que a pesar de los factores mencionados, se mantiene: emocionalidad e hipnotismo en piezas que hablan de amor, desamor y amistad. Canciones como “A violent noise”, “Replica”, “Brave for you” y la maravillosa “Test me”, son un claro ejemplo de ello.

En definitiva, The xx abrió las cortinas, desempolvó los muebles y dejó que los rayos del sol iluminaran su nueva entrega. Sin embargo, no modificaron el espíritu de su música al perseverar con un pop delicado, simple y reflexivo que, a ratos, se eleva para alcanzar insondables emociones.