Colo Colo prácticamente quedó sin opciones en Copa Libertadores, luego de ser sorprendido 2-0 por el desconocido Delfín de Ecuador.
Y es que el conjunto de Pablo Guede mostró desde el primer momento un desorden táctico que provocó un juego lento, predecible y de fácil resolución para la defensa visitante.
Así, no sorprendió que solo arrestos individuales de Esteban Paredes al inicio del partido o Juan Manuel Insaurralde pasados los 40 minutos llevaran peligro al arco de Delfín.
Pero lo peor ocurrió en la segunda parte, cuando a los 51 minutos Arismendi capturó un rebote en el área local para acallar el Monumental y poner aun más presión a un Colo Colo irresoluto y sin ideas, que solo atinó a abusar del centro y chocar con los defensores del cuadro cetáceo.
Los ingresos de César Pinares, Gabriel Suazo y Nicolás Orellana poco hicieron efecto para cambiar el destino del duelo, que terminó de irse a negro en los descuentos, cuando Carlos Carmona metió en balón en propia puerta.
Con esto, Colo Colo queda cuasi eliminado en fase de grupos, quedando colista de su grupo con apenas una unidad en tres encuentros, y debiendo ganar como visitante en Manta y Colombia, además de vencer a Bolívar de local para seguir con vida.
Algo que a la luz de lo visto en el Estadio Monumental ante Delfín, es imposible.
