Kendra Wilkinson, ex conejita de Hugh Hefner, tiene 29 años y está felizmente casada con Hank Baskett desde 2008, momento en que abandonó la Mansión Playboy donde vivía desde los 18.
Hace unos días reveló algunas anécdotas de cómo fue su vida allí, en una de las casonas más reconocidas en el mundo. Además allí pudo conocer en profundidad las conductas del fundador del imperio.
A continuación los 4 secretos turbios de la Mansión Playboy:
1. Alcohol y drogas
Wilkinson dijo que el alcohol y las drogas la ayudaron a “sobrevivir” su estadía y que no disfrutaba teniendo sexo con Hefner. “En general estaba muy borracha haciendo esas cosas. Trataba de que no me importara mucho hasta el día siguiente. Tenía que estar muy borracha o fumar mucha hierba para sobrevivir a esas noches”, contó.
2. Diferencias de edad
Con sólo 18 años, Hefner le preguntó si quería ser parte de sus mujeres. “Me pidió que fuera una de sus novias y me gustó. No sabía qué significaba, pero al demonio, estoy ahí”, dijo la bella rubia. En ese entonces, Hefner tenía 78 años, 60 más que su nueva huésped.
3. “No sabía que incluía sexo”
“Me pidió ser parte de la Mansión Playboy y acepté, por supuesto. Fui de inmediato, pero no sabía que (la propuesta) incluía sexo”, confesó Wilkinson.
4. ¿Sexo obligatorio?
“No estás oblgiada. Es tu decisión”, aseguró Kendra, y explicó que “él realmente ve a las mujeres en su casa como relaciones. ¿Honestamente? Todas ellas duermen con él. Pero también son las mejores personas”.
