La sombra de corrupción que sigue oscureciendo los Premios Grammy

La tarde del martes era esperada por toda la industria musical del mundo, ya que se conocerían los nominados a los Grammy 2021. Pero tras conocerse los candidatos a cada premio, The Weeknd se encargó de desviar la discusión al traer de regreso las acusaciones de corrupción en contra de la de la Academia Nacional de Artes y Ciencias de la Grabación de Estados Unidos.

Sus declaraciones rápidamente hicieron recordar las acusaciones que lanzó el pasado mes de enero la ex directora ejecutiva, Deborah Dugan, quien en primera instancia fue suspendida de sus funciones a solo cinco meses de convertirse en la primera mujer en ocupar dicho cargo. Esto porque una asistente la acusó de crear un “ambiente tóxico” y la calificó de acosadora.

Pero Dugan tenía algo más que decir. A solo días de la ceremonia de este año, llegó hasta el programa Good Morning American para acusar al jefe legal de la institución de intentar propasarse con ella la primera vez que se reunieron. A eso sumó que su suspensión se debía a que se quejó de la cultura machista que existía al interior de la Academia y que la asistente que la acusó no quería hacerlo.

Una semana antes de su aparición en televisión, Dugan presentó una demanda donde aseguró que al interior de la organización había un ambiente “tóxico e intolerable”, que buscaba realizar “cambios desde dentro” pero “las viejas estructuras” de la institución no se lo permitieron. También aseguró que existía una cultura del acoso sexual por parte de ejecutivos, “escandalosos conflictos de interés” a la hora de nominar artistas, al igual que en las votaciones, lo que llevó a convertir en todo un negocio una ceremonia que buscaba premiar a la música.

En ABC News, explicó que “el sistema debería ser transparente y hay incidentes de conflicto de interés que manchan los resultados”, señalando que es un comité secreto el que elige a los nominados, grupo que integran personas que tienen negocios y relaciones personales con artistas.

Por ejemplo, de los 20 pre nominados, solo cinco o siete llegan a la elección final. De ellos, dijo Dugan sin entregar nombres, el que estaba en el puesto 19 de los postulantes a Canción del Año en 2019 terminó logrando la nominación, porque el representante del artista tenía un cargo en la junta directiva de la Academia e influyó sobre el comité. En ese entonces, se dejaron de lado en dicha categoría a artistas como Ariana Grande y Ed Sheeran.

¿Qué pasó después?

Ante las acusaciones de corrupción que desató Deborah Dugan, los Grammy respondieron de inmediato y aseguraron que la organización “no tiene absolutamente nada que ocultar y, de hecho, agradece la oportunidad de contar su historia”.

Pero las incendiarias declaraciones de la ex CEO calaron hondo en la Academia. Según da cuenta la revista Rolling Stones en un artículo publicado el pasado 19 de noviembre, se invirtieron “importantes recursos” en diversidad, como por ejemplo la contratación de su primera oficina en jefe de diversidad e inclusión, Valeisha Butterfield Jones.

Esta profesional ya ha iniciado sus primeras gestiones como cerrar un acuerdo con Color of Change, organización que la ayudará a contar con un grupo asesor de música negra. A eso se suma que contarán con 2.300 miembros votantes nuevos, de los que un 48% son mujeres y que el 33% venían de grupos minoritarios y grupos raciales subrepresentados.

Luego de las denuncias de corrupción, los Grammy también adoptaron otro tipo de medidas, como por ejemplo, contrataron a un nuevo director de operaciones, renovaron su equipo de desarrollo comercial y ascendieron a varios funcionarios a nuevos puestos de liderazgo.

Durante la pandemia, creó un fondo multimillonario para ir en ayuda de músicos y trabajadores de la música que se encontraban sin trabajo.

También siguieron la sugerencia que hizo Tyler The Creator y, en medio de las protestas por el movimiento Black Lives Matter, sacaron la palabra Urbano de la categoría Mejor Música Urbana y crearon Mejor Álbum de R&B Progresivo.

Con todos estos cambios, los Grammy buscaban que la ceremonia del próximo año dejara atrás las acusaciones de corrupción y que contarían con un sello distintivo de “una nueva versión de la Academia de la Grabación”.

La arremetida de The Weeknd

Horas después de conocer a los nominados, lo que generó múltiples reacciones por la ausencia de varios artistas, uno de ellos era The Weeknd. A través de sus redes sociales, el intérprete de canciones como “Blinding Lights” y “Can’t Feel My Face” no tuvo filtro alguno al señalar que “los Grammy siguen corruptos. Me deben a mí, mis fanáticos y a la industria, transparencia”.

Ante todo esto, el director ejecutivo interino, Harvey Mason Jr. se declaró sorprendido luego que The Weeknd no lograra ninguna nominación y aseguró entender su frustración.

“Me sorprendió y puedo empatizar con lo que está sintiendo. Su música de este año fue excelente y sus contribuciones a la comunidad musical y al mundo en general son dignas de admiración de todos”, dijo, para luego referirse a los rumores que apuntaban a que la decisión del cantante de actuar en el Super Bowl lo habría afectado en sus posibles postulaciones al gramófono.

Sobre esto, explicó que “para ser claros, la votación en todas las categorías terminó mucho antes de que se anunciara la actuación de The Weeknd en el Super Bowl, por lo que de ninguna manera podría haber afectado el proceso de nominación. Todos los nominados al Grammy son reconocidos por el cuerpo de votantes por su excelencia y los felicitamos a todos”, cerró.

Un día antes de que se dieran a conocer las nominaciones, Mason aseguró a Variety que estuvo en la denominada “sala principal” este año, donde se deciden las nominaciones principales. “Observé, y las personas que están en ella son profesionales de la música, en la cima de su oficio en la composición y producción de canciones y hay muchos artistas. Y estaban escuchando críticamente cada canción que llegaba a sus escritorios, o escritorios virtuales, así que no creo que muestre un defecto en el proceso”, dijo.

“Es un proceso largo y arduo y la gente se enorgullece de él. A la gente en esa habitación le importa: no hay agendas allí, no hay ‘desaire a esta persona’ o aquella persona. Se trata de ‘intentemos encontrar la excelencia'”, agregó.