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10 de Septiembre de 2014

Lo que está detrás del round entre Velasco y MEO

Analistas aseguran que ambos tratan de aprovechar la oportunidad de posicionarse ante la falta de un liderazgo claro en la Nueva Mayoría.

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Andrés Velasco y Marco Enríquez – Ominami no se pasan. El debate de ayer en El Informante fue el primer enfrentamiento directo de los dos ex candidatos presidenciales, que se venían criticando a través de la prensa desde hace tiempo.

No fue menor el encuentro: ambos son, según la encuesta CEP, los personajes políticos mejor posicionados para las próximas elecciones presidenciales de 2017. “Lo que vimos ayer fue el primer enfrentamiento entre una Nueva Mayoría más progresista y la restauración de la vieja Concertación”, opina el analista político Gonzalo Müller.

Para el también analista Max Colodro, ambos quieren posicionarse ante la falta de una figura fuerte. “Los dos están observando que hay una oportunidad, en la medida en que en la Nueva Mayoría no hay un liderazgo de reemplazo a Bachelet. No hay hasta el momento un liderazgo que pueda heredar ese capital político para una próxima elección. Marco y Velasco saben que hay un gran espacio, marcado por nichos bien distintos, más hacia el centro en caso de Velasco y más hacia la izquierda con Marco. Ambos tratan de perfilarse haciendo énfasis en las diferencias de estilo y contenido”, detalla.

Para Müller, el tema también pasa por la necesidad que tienen ambos de mantenerse vigentes, ya que ninguno cuenta con parlamentarios y no son parte de la agenda legislativa. Enfrentándose directamente, se potencian ambos. “Lo que sí es que ambos tienen la misma debilidad, que es Michelle Bachelet. Es muy difícil visualizar a cualquiera de ellos como un heredero del actual gobierno. La agenda y las opiniones de Andrés Velasco difieren abiertamente de la agenda del gobierno. Él fue critico en la primaria de la entonces candidata Bachelet y ha sido critico de la ahora presidenta Bachelet”, dice.

Sobre Enríquez – Ominami, Müller recalca que “tiene un quiebre que no ha logrado superar, es una persona non grata en Palacio, uno de los pocos líderes políticos que no es recibido en La Moneda”.

En esta línea, Colodro plantea que ninguno de los dos quiere perder los vínculos con la Nueva Mayoría. “Velasco, a pesar de que se ha ido moviendo hacia el centro en relación a una coalición que tiene su hegemonía hacia la izquierda, sabe que si rompe esa conexión con la NM, al menos discursivamente, pierde ese nicho. Él trata de reforzar las posiciones de centro de la NM, marcando también un contraste con la derecha. Marco no necesita eso, sino que apuesta a la proyección de la NM por la izquierda y la continuidad de las reformas del gobierno, que fue lo que defendió ayer”.

Caminos propios

El debate de ayer dejó claro una cosa: no están dispuestos a ser parte del mismo proyecto político. El mismo Velasco señaló directamente que no competiría en una primaria con MEO, a quien catalogó como “un tipo de la izquierda antigua”.

Si bien el líder del PRO no respondió directamente a la misma pregunta, tampoco se guardó a la hora de marcar diferencias con el ex hombre de Hacienda del Bachelet. Mi problema no eres tú, Andrés, mi problema son las fuerzas conservadoras para las cuales tú eres funcional. Es la derecha, son los grandes empresarios. Son ellos los que votan por ti y los que quieren que nada avance”, señaló anoche en el programa de TVN.

Max Colodro explica que ambos tienen la misma estrategia, que es “asumir que el país está viviendo un período de contraste y de relativa polarización, y que, en esa lógica, la diferenciación y la búsqueda de posicionamiento es algo que ayuda”.

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