En el marco del proceso de regularización migratoria, el Gobierno anunció que este año deberán ser expulsados del país más de 2 mil inmigrantes, dado que cuentan con antecedentes penales.
“Producto de todo este esfuerzo que está haciendo el Ministerio del Interior con la PDI, vamos a pasar las dos mil expulsiones este año. Esa es una señal clara e inequívoca de que nos tomamos en serio el concepto de ordenar la casa”, manifestó a El Mercurio el subsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla.
El proceso se realizará en tres etapas. Lo primero es identificar a los extranjeros que ya cumplieron su condena en Chile y que por ley deben ser expulsados. Luego, el Gobierno se enfocará en aquellos extranjeros que son infractores de la ley migratoria porque están en el país en situación irregular, pero no tienen antecedentes penales.
Por último, el 23 de julio, se atenderá la situación de aquellos extranjeros que no se registraron dentro del plazo. A juicio de Ubilla, quienes no lo hagan se presume que es porque tienen antecedentes penales, razón por la que se les buscará para deportarlos.
Según estimaciones del Ejecutivo, actualmente hay 1.119.000 extranjeros que residen en el país, de los cuales 300 mil estarían en situación irregular.
