El caso de una mujer de la región del Maule que permaneció desaparecida por cuatro días, y que fue hallada deambulando en la ciudad de Mejillones, dio un vuelco luego que la Fiscalía de Curicó la acusara de una presunta simulación de su secuestro.
Todo comenzó el jueves pasado, cuando la familia de Maritza Bravo, de 25 años, presentó una denuncia por presunta desgracia. Tras días de angustia, la joven fue encontrada en el norte del país con el pelo corto y bajo los efectos de drogas.
Al entregar su testimonio, la mujer afirmó que fue abordada por tres individuos en el camino que une Tutuquén y Rauco, en donde se encontró su moto abandonada.
Pero la fiscal Lucy Bustamante entregó una nueva versión de los hechos, afirmando que Bravo “llegó sola y sin presión alguna” a la región de Antofagasta y que incluso se habría hospedado en hostales locales con otras personas.
“Con testigos que estuvieron con ella (y) junto con la declaración de la señorita Bravo, se pudo establecer que el delito de secuestro nunca existió“, expresó la persecutora en declaraciones consignadas por radio Cooperativa.
El Ministerio Público imputará a la mujer por el delito de obstrucción a la investigación, por el que arriesga una pena de presidio menor en su grado mínimo.
