Secciones
Ambiente

Con carnaval "Los mil tambores de petróleo" protestan por derrame en Quintero

Organizada por el movimiento ciudadano “Salvemos Quintero”, la manifestación, que se realizará este sábado, plantea una serie de demandas al Estado, que ataquen directamente las consecuencias del derrame de crudo ocurrido el 24 de septiembre.

Este sábado 25 de octubre, desde el mediodía, las comunidades de Quintero y Puchuncaví  protestarán en familia con el carnaval “Los mil tambores de petróleo”, a un mes del grave derrame de hidrocarburo que afectó a la bahía de Quintero.

Organizada por el movimiento ciudadano “Salvemos Quintero”, la manifestación busca demandar al Estado un plan de mejoras verdaderamente enfocado en los problemas de salud y al ecosistema que ha causado tanto el derrame petrolero del como los 50 años de contaminación indiscriminada sobre la zona.

“Como comunidad exigimos al Estado que detenga y congele el ingreso de nuevas industrias al parque industrial de esta zona; que se acelere desde el Ejecutivo normativas que endurezcan la norma ambiental y se castigue a empresa contaminantes; y exigimos una franquicia tributaria o rebaja en los combustibles: queremos una zona franca para Puchuncaví y Quintero”, afirma Joshua Cadima, vocero del movimiento, según consigna El Martutino.

El carnaval comenzará con un pasacalle por la avenida principal de Quintero, integrado por una decena de comparsas, batucadas y músicos locales e invitados, incluyendo a Miguel Barriga, de Sexual Democracia.

/Twitter-@salvemosquinte

/Twitter-@salvemosquinte

Querella

La iniciativa “Los mil tambores de petróleo” se agrega a una querella criminal interpuesta este martes ante el Tribunal de Garantía de Quintero contra quienes resulten responsables tanto del derrame de combustible como del daño ambiental provocado.

Quintero y Puchuncaví comparten terreno en la Bahía de Quintero, donde opera una serie de industrias, algunas altamente contaminantes, con una débil regulación y escasa fiscalización, lo que da lugar a situaciones como la ocurrida el pasado 24 de septiembre.

Notas relacionadas








No creo en el mejor disco del año

No creo en el mejor disco del año

Dicho eso no pretendo evangelizar a nadie. No vengo a dictar cátedra ni a levantar un tótem. Simplemente me animo, en este momento del año tan dado a los balances, a hablar de un disco. No el disco. Mi disco. El que, sin avisar, fue compañía, refugio y espejo. En mi caso, ese viaje personal tuvo nombre propio: Twilight Override, de Jeff Tweedy.

Foto del Columnista Mauricio Jürgensen Mauricio Jürgensen