Cuando Constanza vio entrar a su pequeño almacén de barrio en Concepción a un niño de unos 10 años llorando se acercó a preguntarle qué le pasaba. En sus brazos traía un pequeño animal.
El pequeño, desconsolado, le preguntó si es que quería a su gatita. Pero ella le dijo que no podía porque ya tenía otros tres en su casa. “Me respondió que su mamá lo había mandado a botarlo, pero que él no quería hacerlo porque estaba lloviendo… y se pone a llorar”, contó Constanza en su Facebook.
Ante esa situación ella le dijo al niño que no se preocupara, que ella se quedaría con el animal y lo cuidaría por mientras le buscaba un hogar definitivo. Pero más allá del hecho, Constanza se preguntó “¿qué tipo de ejemplo le está dando su mamá a este niño?”, algo que fue ampliamente comentado en las redes sociales.
La mujer tiene a la gatita en su local, en una jaula con comida, agua y abrigo y la llevó al veterinario para vacunarla. “Se da en adopción pero quien desee adoptarla tiene que cancelar a los 5 meses su esterilización. Se va con su primera vacuna. Sólo gente responsable no porque vio el video y por pena la adopten, no. Sólo gente que la ame de verdad y que tenga corazón”, dice el anuncio de su Facebook.
