El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, dejó en claro que el intento de golpe de Estado liderado por parte del Ejército fue sofocado, anunciando que sus responsables “pagarán el precio”.
“Este levantamiento, este movimiento es un gran regalo de dios para nosotros. Porque el Ejército será limpiado”, indicó el mandatario en rueda de prensa tras llegar a Estambul.
Erdogan llamó a la población a ser “pacientes, ya todo volverá a la normalidad”, asegurando que “el levantamiento de hoy ha sido un acto de traición y los responsables pagarán el precio”, agregando que fue liderado por “una fracción minoritaria del Ejército”.
Esta asonada dejó como saldo 6 civiles fallecidos y 100 heridos solo en la capital turca, mientras que las autoridades recalcaron que ya fueron detenidos 120 golpistas.
Por su parte, el primer ministro Binali Yildirim declaró que “el intento de golpe de Estado militar de este viernes por la noche en Turquía se encuentra ampliamente bajo control”
“Es una iniciativa idiota, abocada al fracaso y se encuentra ampliamente bajo control”, agregó y apuntó que los servicios de inteligencia anunciaron “una vuelta a la normalidad“, a pesar que en distintos puntos de la capital se registran enfrentamientos entre partidarios del gobierno y militares alzados.
