Tony Perkins es un reconocido pastor estadounidense, reconocido por su dura postura en contra de la comunidad homosexual. Tanto así, que aseguraba que Dios los castigaba con desastres naturales para castigar a estos “pervertidos”.
Solo por poner un ejemplo, en 2015 sostuvo que el huracán Joaquín era un signo de la “ira de Dios” por la legalización del matrimonio homosexual y el aborto. “Dios está tratando de enviarnos un mensaje”, señaló en esa oportunidad.
Pero parece que con quien quiso ensañarse no fue con la comunidad LGBT, sino con el mismo Perkins. Y es que la casa del pastor fue una de las afectadas por las fuertes lluvias que cayeron sobre el estado de Louisiana.
“Esta es una inundación, me atrevo a decir, de proporciones casi bíblicas”, publicó Perkins en su cuenta de Twitter.
