La entrevista que el ex Presidente Sebastián Piñera dio a revista Capital continúa generando reacciones en el mundo político.
La fibra más sensible de la administración Bachelet, el caso Caval, también fue materia de conversación por parte del otrora mandatario, quien no precisó si le cree o no a Bachelet respecto de que la Presidenta se enteró por la prensa de los negocios inmobiliarios de su nuera. “No tengo todos los antecedentes para hacer ese juicio, pero ella sí los tiene y más allá de si se enteró por la prensa o no, debiera haber asumido en forma más clara esa conducta y sus consecuencias”.
Sobre cómo él habría enfrentado este escándalo, Piñera aseguró que “una de mis principales preocupaciones cuando era candidato y después cuando fui electo Presidente, era la conducta de la gente que estaba en mi círculo familiar más cercano”.
En ese sentido aseguró que “fui muy enfático en pedirles encarecidamente que tuvieran reglas de conducta mucho más exigentes que las de sus amigos. También se lo pedí a un hermano mío más bohemio…”. Y en ese contexto, Piñera lanzó una frase muy particular: “debo reconocer, y quiero agradecer que desde ese punto de vista, mi familia no me falló”.

Sus declaraciones impactaron con fuerza en La Moneda, mientras la mandataria se encuentra de vacaciones. Quien salió a responder fue la vocera subrogante de gobierno, Claudia Pascual, la que indicó que “nos parece inapropiado referirse a la familia de otras personas”, según plantea La Tercera.