La historia es la siguiente: primero el abogado de Rafael Garay, Ángel Valencia, presentó una denuncia por presunta desgracia tras la desaparición del economista, quien en una primera versión se encontraba en Francia en un tratamiento de cáncer.
Posteriormente la familia, en un comunicado, confirmó la versión y presentó otra denuncia, asegurando que el empresario debía volver a Chile a mediados de septiembre desde el país galo, pero finalmente no llegó.
¿Qué había pasado? ¿Se había entregado a la enfermedad? ¿Se fue a un retiro a pasar sus últimos días? Fueron parte de las dudas que se replicaban en redes sociales mientras se compartía la noticia. Pero la sorpresa vino esta mañana. La PDI en una primera información aseguró que Rafael Garay se encontraba en Tailandia.
De inmediato comenzaron las dudas, principalmente relacionadas a los negocios de Garay, tanto que incluso se habló de una “estafa piramidal”. Posteriormente se supo que la clínica francesa donde el economista supuestamente se estaba tratando el cáncer no lo tenía en sus registros, y aún más, nunca había pisado el recinto.
Pues bien, luego de todo esto, finalmente Cancillería de Chile confirmó que Garay se encuentra en Rumania luego de un largo tour que, efectivamente, incluyó Francia, Tailandia y Holanda. ¿Cómo se supo? Este jueves, el profesional apareció en el consulado de Chile en Bucarest para pedir un certificado de soltería.
Al organismo le pareció extraña esta acción, por lo que dio aviso de inmediato a Cancillería. Los teorías sobre “negocios truchos” comenzaron a circular con más fuerza, en un caso que recién comienza y tiene más dudas que certezas.
Por ahora, la PDI aseguró que no existe orden de detención en su contra.
