Cómo se detectó el primer caso de la variante delta en Chile
La mujer contagiada había viajado a Estados Unidos por un funeral e ingresó al país con un PCR negativo, arrojando luego positivo en un test de anticuerpos que se le aplicó al ingreso de Talca.
Por Sebastián Dote
La persona se encuentra aislada junto con su familia. AGENCIA UNO/ARCHIVO
El Ministerio de Salud (Minsal) confirmó la detección del primer caso de la variante delta del COVID-19 en Chile, el que encendió las alarmas por la aparente alta capacidad de transmisión que tendría en comparación a la versión original del coronavirus.
La mujer de 43 años, originaria de la ciudad de Talca, fue examinada y se encuentra aislada tras la secuenciación de sus muestras por parte del Instituto de Salud Pública (ISP).
Según lo publicado por La Tercera, la persona había viajado a Estados Unidos por motivo de un funeral de un cercano, cumpliendo con una de las causales establecidas por el cierre de las fronteras fijado por las autoridades.
Al ingresar al país la paciente tenía un PCR negativo, por lo que se presume que su contagio ocurrió en el aeropuerto estadounidense o durante el viaje al país.
En uno de los controles para entrar a Talca fue sometida a un test de anticuerpos, el que dio positivo. Luego fue sometida a otro PCR, que confirmó el diagnóstico por COVID-19. Debido a su origen, la muestra fue sometida a una secuenciación genómica, la que permitió detectar la presencia de la variante surgida en India.
Durante su exposición ante la Cámara de Diputados, el ministro de Salud, Enrique Paris, afirmó que la mujer “estuvo aislada, afortunadamente, por nuestro sistema de testeo, trazabilidad y aislamiento”, por lo que habría cumplido con su paso de cinco días por un hotel de paso antes de poder volver a su domicilio.
Tanto ella como el resto de su familia se encuentran en cuarentena y sus pruebas serán sometidas a secuenciación.
El primer caso de la variante delta en el país llegó en medio del debate por la extensión del estado de excepción constitucional, el que es rechazado por sectores del oficialismo, como la UDI, que buscan poner fin a las cuarentenas y el toque de queda, apuntando a la alta cobertura en la vacunación.
