El Senado aprobó la acusación constitucional en contra del juez de la Corte de Apelaciones de Santiago, Antonio Ulloa, apuntando por sus vínculos con el abogado Luis Hermosilla, lo que quedó al descubierto con el Caso Audios, y puso fin a su carrera de 36 años en el Poder Judicial.
El libelo contó con 44 votos a favor, tres abstenciones y ninguno en contra en su primer capítulo, centrado en el notable abandono de deberes del magistrado, ya que filtró una serie de resoluciones judiciales a Hermosilla.
El segundo capítulo tenía como principio la falta al deber de abstención e imparcialidad en decisiones judiciales, recibió 27 votos a favor, ocho votos en contra y ocho abstenciones.
En cuanto a la acusación de intervención indebida en una serie de nombramientos en el Poder Judicial, fue aprobada con 30 votos a favor, siete en contra y ocho abstenciones.
A pesar de la decisión del Senado, el ahora ex juez Antonio Ulloa reiteró su inocencia, descartó ser parte de la red de corrupción de Luis Hermosilla y dejó ver que la Corte Suprema descartó destituirlo.
“Jamás conversé con el señor Hermosilla respecto de una causa jurisdiccional administrativa, ya sea de la Corte de Copiapó o de la Corte de Santiago, en la cual él pudiera haber intervenido en la decisión que yo tomé”, declaró en la Cámara Alta.
Ulloa recalcó que “esta acusación constitucional es la culminación de una operación política. Se me ha construido una imagen de mi persona en que se falta a la verdad sostenidamente, lo que tiene un componente ideológico. No tengo participación en ninguna red de corrupción”.