Aunque las “selfies“, autorretratos o “fotos pokemonas” suelen asociarse con circunstancias más frívolas, en el caso de esta mujer se trata de una imagen que le salvó la vida.
Según el testimonio de Susann Stacy, de Kentucky (EEUU), tras haber sido atacada por su esposo, éste arrancó el teléfono de la pared para impedir que ella llamara a la policía.
Así, Stacy se tomó una foto -donde podía verse su rostro severamente golpeado– y la subió desde su teléfono móvil a su perfil de Facebook, junto a la frase “Ayuda por favor, ¿alguien?”
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Tras ver la imagen, amigos de la mujer llamaron al departamento del Sheriff local, quienes acudieron hasta su hogar.
“Tenía varias heridas en la cabeza”, declaró el alguacil Sam Mullins. “Parecían ser graves, pero realmente no podíamos decirlo en ese momento, debido a que su pelo estaba enmarañado con sangre”, sostuvo.
Agregó que el pensamiento rápido de Stacy, cuyo esposo había dejado el lugar para cuando llegó la policía, pudo haber salvado su vida.
