Providencia y el lado oscuro de las prohibiciones
El dicho “la caridad parte por casa”, a mi juicio, no puede transformarse en un juego de suma cero o negativa. La tranquilidad de algunos no debiese ser a costa de la mayor intranquilidad de otros, las pérdidas de algunos comerciantes no debiesen transformarse en excesivas ganancias para otros.
Javier Scavia