Científicos del Jet Propulsion Laboratory (JPL) de la NASA han analizado nuevas imágenes de la superficie de Marte que suponen la prueba más tangible hasta ahora de la posible existencia de agua fluyendo en el planeta rojo.
Se trata de unas líneas oscuras (en la imagen) que aparecen en la superficie a medida que aumenta la temperatura, exactamente igual que si hubiera líquido fluyendo entre las rocas. Los investigadores llaman a estos flujos “recurring slope lineae” (RSL) y aparecen durante los meses de mayor temperatura en Marte.
La NASA cree que esto podría ser obra de un anti-congelante natural generado por el alto contenido de hierro en el terreno. Han llegado a esta conclusión al superponer mapas de los componentes minerales de la superficie sobre el área donde se están produciendo esos flujos.