Arturo Vidal enfrenta demanda de agencia de publicidad por su logo tatuado en el cuello
Además de las demandas de nulidad ante Inapi, Hueso Santo presentará una querella criminal contra el jugador por infracción a la Ley de Derecho de Autor.
Por Redacción EL DÍNAMO
Arturo Vidal enfrenta una demanda de una agencia de publicidad, creadora de su icónico logo tatuado en el cuello, ya que lo acusan de apropiarse “indebidamente de un diseño y marca que no le pertenecen”.
Se trata de la empresa Hueso Santo, la cual llegó hasta el Instituto Nacional de Propiedad Industrial (Inapi),a través de su abogado Felipe Schuster, indicó que “demostraremos la mala intención de sus representantes y del propio jugador al intentar apropiarse, desde el año 2014, de un logo que no fue creado por él, sino por uno de mis representados, sin que hubiese mediado ningún tipo de autorización o licencia previa”.
Según consignó radio Cooperativa, además de las demandas de nulidad ante Inapi, Hueso Santo presentará una querella criminal contra el jugador por infracción a la Ley de Derecho de Autor.
La empresa explicó que en mayo del 2014 creó y registró el logo “AV” y la marca “King Arturo”, las cuales fueron presentadas a los representantes de Vidal, Twenty Two, pero sin llegar a un acuerdo.
Ante esto, Fernando Aljaro, de la agencia de publicidad, aseguró que “vimos una clara oportunidad que los representantes del futbolista no habían valorado y desarrollamos una estrategia comercial que incluía el diseño del logo y de la marca de King Arturo, la creación de varias líneas de productos y de un posicionamiento que le diera fuerza a esta estrategia”.
“La respuesta de Twenty Two a nuestra propuesta comercial fue un no rotundo. Para sorpresa nuestra y sólo días después, el jugador llegó a Chile para concentrarse en vísperas del Mundial de Brasil 2014, con nuestro logo tatuado en el cuello y realizando el lanzamiento en un evento con su familia y prensa el 27 de mayo del mismo año”, agregó.
Aljaro sostuvo que “los representantes del jugador, seguramente aconsejados por sus abogados, le enviaron a Italia nuestro diseño para que se lo tatuara y de esta manera bloquearnos el ingreso a este negocio. Así de descarada fue la forma en que nos sacaron de la cancha”.
