“Yo no quiero niños siendo retirados de sus padres. Pero cuando buscamos procesar a los padres por venir aquí ilegalmente, algo que se debe hacer, hay que separar a los niños”, dijo el Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en alusión a la controvertida política antimigratoria que activó hace unos meses.
Como una forma de disuadir la migración ilegal, Trump echó en marcha una política de “tolerancia cero”. Entre el 5 de mayo y el 9 de junio, hubo poco más de 2 mil menores de edad que fueron separados de sus padres, dado que fueron detenidos por el Departamento de Justicia, mientras que niños y niñas quedaron alojados en precarios albergues.
Trump señaló que la otra opción es no procesar a los inmigrantes que ingresan al territorio estadounidense en forma ilegal, pero aseguró que no está dispuesto a tranzar en aquello.
“Queremos poner fin a la crisis en la frontera mediante obtención de autoridad legal y recursos para detener y remover familias inmigrantes enteras y llevarlas a su país. Tenemos que llevarlos de retorno a su país”, dijo.
I want to take a moment to address the current illegal immigration crisis on the Southern Border…it has been going on for many, many decades… pic.twitter.com/1F7EK9Ef88
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) June 19, 2018
Según información del Departamento de Salud y Servicios Humanos, actualmente tienen bajo su cuidado a 11.700 niños y menores de edad extranjeros, retenidos en unos 100 albergues distribuidos en 17 estados del país.
No sólo organismos internacionales han criticado la dura medida, sino que también la propia primera dama, Melania Trump, señaló que “odia” que los niños sean separados de sus familias.
