Peces, tortugas, ballenas, esponjas de mar y corales, que pueden vivir por más de 120 años, son algunas de las especies que habitan en los distintos montes submarinos que están presentes a lo largo de todo el país.
La Ley de Pesca aprobada en 2013, reconoció la importancia de estos sitios y determinó, como medida de protección, la prohibición de pesca de arrastre en las cuatro zonas geológicas ya conocidas, ubicadas en el Parque Marino Moty Motiro Hiva, en la isla Sala y Gómez. En tanto, en el resto de la costa se realizaron estudios de mapeo para permitir localizar los otros sitios.
Con esto, la Subsecretaria de Pesca consiguió identificar 117 de estos sitios en Chile, lo que equivale al 0,84% de los casi 14 mil que hay en el mundo.
Estas zonas son elevaciones de tierra cuya altura supera los mil metros, sin sobrepasar la superficie marina, y reúne las condiciones necesarias para que vivan especies vulnerables.
Los 117 montes submarinos abarcan una superficie total de protección de 68.065,63 Km cuadrados, lo que equivale a 4,4 veces la superficie de la Región Metropolitana. Con esto, la superficie no autorizada para la pesca de arrastre se elevó a 372.565 km2.
Isla de Pascua lidera estos sitios, con un total de 33, seguidos por la zona norte del país con 21, y las Islas Desventuradas donde hay 18 formaciones geológicas de este tipo.
“Lo que estamos haciendo no tiene precedentes. Chile está conservando el 100% de los ecosistemas marinos que se desarrollan en sus montes submarinos”, explicó el subsecretario de Pesca, Raúl Súnico, sobre la medida que comenzó a regir desde el sábado recién pasado.
“Esta es una medida de sustentabilidad pues cautela la integridad de los ecosistemas marinos vulnerables”, añadió.
Desde Oceana, organización internacional que se dedica de manera exclusiva a la protección de los océanos, están de acuerdo con la medida.
“Hicimos esta propuesta en 2009, cuando se necesitaba proteger urgentemente aquellos llamados ecosistemas marinos vulnerables frente a la pesca de arrastre, que casi no tenía limitaciones”, afirmó Alex Muñoz, director ejecutivo de la entidad, a La Tercera.
Fiscalización
Luego de que se publicó el decreto, la primera misión será informar a los pescadores sobre la vigencia de la medida, especialmente a los barcos industriales que serán los más afectados por la medida.
En relación a esto, Súnico, aseguró que “la Subsecretaria junto al Servicio Nacional de Pesca mantienen un contacto directo y permanente con todos los sectores, es por tanto que a través de esos canales los involucrados serán enterados. El rol que juegan los Directores Zonales de Pesca en sus regiones es fundamental también”.
El Servicio Nacional de Pesca (Sernapesca) será quien esté a cargo de fiscalizar. “A través del Sistema de Posicionamiento Satelital el servicio registrará las zonas de los montes que quedan prohibidas a la pesca de arrastre de fondo, y con la información de posición que automáticamente generan las naves pesqueras, se podrá saber si ellas están o no haciendo pesca de arrastre de fondo en dichas zonas”, añadió Súnico.
Por su parte, Muñoz agregó que la protección “se debería complementar con áreas marinas protegidas que restrinjan la pesca también en la superficie y en una zona más amplia, de tal manera que los montes y sus áreas de influencia actúen como genuinas zonas de reproducción y resguardo de la vida marina”.
